Gusto y tranquilidad

El gabinete de Miguel Ángel Mancera, por suerte para todos nosotros, nada tiene de amloísta o bejaranista y hasta incluyó al ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, quien contestando la pregunta dijo que el tema de Azerbaiyán no le tocará a él, sino al secretario de Gobierno.

Lourdes Mendoza
Columnas
Alfredo del Mazo, presidente municipal de Huixquilucan. (Foto: Tomada de Internet)
Foto: Tomada de Internet

El gabinete de Miguel Ángel Mancera, por suerte para todos nosotros, nada tiene de amloísta o bejaranista y hasta incluyó al ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, quien contestando la pregunta dijo que el tema de Azerbaiyán no le tocará a él, sino al secretario de Gobierno.

Otra grata y gran sorpresa fue ver a Salomon Chertorivski, pues pocos recordábamos -por no decir nadie- que él trabajó con Lázaro Cárdenas en Michoacán. También el nombramiento de Carlos Navarrete como secretario del Trabajo, con quien por cierto estuve en San Lázaro en el palco A fila 1 para la toma de protesta de EPN y a mi pregunta sobre si estaría en el gabinete de Mancera sólo me contestó: “¿Tú sabes? ¡Porque nadie sabe nada!” Y ya en el auditorio me comentó que se enteró la noche del lunes.

Y ni qué decir del gusto y tranquilidad por la designación de Rodolfo Ríos, pues no cabe duda alguna de que será un gran procurador. Héctor Serrano repitió como secretario de Gobierno y el martes estuvieron él y Mancera como una hora platicando en el Four Seasons.

Fernando Macías, su secretario de Comunicación Social, es un profesional en su campo y gran negociador. Así, pues, esta área no será una pata flaca como en la de Ebrard. Su particular, Luis Serna, es tal cual es Mancera: ubicado, respetuoso y trabajador.

Por cierto, otra gran sorpresa fue el posicionamiento del PAN en voz de Federico Döring, ya que dejó de lado su rijosidad y no sólo le ofreció a Mancera trabajar y construir en conjunto, sino que le dijo que no harían un corte de caja de su antecesor. Y le pidió que fuera un jefe de gobierno que trascienda apoyando a todas las delegaciones, sin importar quién las gobierne, para que puedan tener capacidad de respuesta.

Otro tema que no puedo dejar de comentar es la gran convocatoria de gobernadores: logró 16 en total, de todos los colores, como Pepe Calzada, César Duarte, Malova, Graco Ramirez y Manuel Velasco. O la de personajes VIP como Manlio Fabio Beltrones, quien llegó muy puntual, Emilio Gamboa o José Antonio González.

El tache fue que no estuvieron -y según me contaron ni siquiera los invitaron- los representantes de Canacintra, Coparmex y la Canaco.

En el primer lugar del palco, junto al pasillo principal, estaba René Bejarano, a quien todos los de la izquierda le rindieron honor en mayor o menor medida. Juntó a él sentaron a Chucho Zambrano y ni un buenos días o la mirada siquiera cruzaron. Después estaba sombrita Sánchez Camacho; luego el Inge Cárdenas y Porfirio Muñoz Ledo. ¿Qué tal, eh?

Y como estilo mata carita...

Alfredo del Mazo rindió su tercer y último informe de manera espectacular, pues en esta ocasión todo salió a pedir de boca. Eruviel Ávila lo apapachó y le dijo que políticos de su talla son los que le hacen falta al país. Reportó que no endeudó al municipio, que reestructuró la deuda y cumplió 29 de los 30 compromisos que firmó y que el último está en proceso. Que convirtió mil 300 millones de pesos en infraestructura, más que en las últimas cuatro administraciones juntas. ¡Felicidades por tu nuevo puesto!