Ruido y alto volumen = deterioro auditivo irreversible

El sonido estridente puede provocar además trastornos a la salud como problemas cardiovasculares, nerviosismo e incluso alteraciones en el sistema digestivo.

Lorena Ríos
Todo menos politica
El sonido estridente puede provocar además trastornos a la salud como problemas cardiovasculares
Foto: Especial

El sonido estridente puede provocar además trastornos a la salud como problemas cardiovasculares, nerviosismo e incluso alteraciones en el sistema digestivo.

Si experimenta dificultades para oír a las personas que lo llaman; problemas para oír el timbre del teléfono; malinterpreta lo que se le ha dicho; sube el volumen de la televisión o la radio más de lo necesario… debe ponerse en contacto con un profesional en audiología para que evalúe su salud auditiva.

La pérdida auditiva se considera la discapacidad más frecuente en todo el mundo: casi 600 millones de personas (es decir, 10% de la población mundial) tienen problemas de audición leve o severa y se prevé que para 2015 esta cifra llegue a 700 millones, según estudios del Instituto Británico MRC de Investigaciones Audiológicas.


Dicha condición es resultado de diferentes factores, que van desde herencia genética, pasando por medicamentos tomados durante el embarazo, hasta efectos secundarios de enfermedades e infecciones del oído.

También puede ser causa del estilo de vida y el tipo de trabajo, así como del uso indiscriminado de aparatos de sonido a alto volumen, que en el oído puede generar daños irreversibles.

El sonido estridente puede provocar además trastornos a la salud, como problemas cardiovasculares, nerviosismo e incluso alteraciones en el sistema digestivo; aumenta el estrés y genera fatiga; y es enemigo de la productividad laboral, coinciden especialistas en salud auditiva.

Abuso de audífonos

Hasta 20% de los jóvenes de 15 a 25 años presenta pérdida de audición y otros trastornos por el abuso en el uso de reproductores de música y audífonos.

Estudios revelan que cuatro de cada diez jóvenes con problemas de audición escuchan música a alto volumen —de 80 a 120 decibeles (dB) son niveles de ruido similares a una aspiradora y troqueladora— y por periodos prolongados, expone el experto en desarrollo de dispositivos de audición, ingeniero Jonathan Salomon Turquie.

La exposición prolongada a ruidos intensos puede provocar sordera debido a que genera daño a las células del nervio auditivo de manera irreversible y permanente.

Todo ruido cuya intensidad rebasa los 85 dB puede ser peligroso y es recomendable usar protección auditiva. “Al igual que frente a la radioactividad, el cuerpo humano tan sólo puede absorber una dosis limitada de ruido cada día”, precisa el especialista.

Advierte que la sensación de un zumbido en los oídos después de una exposición a ruido (tinitus) en un concierto o de estar muy cerca de las bocinas, indica que el nivel fue demasiado intenso y la exposición periódica puede causar sordera. “La exposición a ruidos mayores a 100 dB, aun por periodos cortos, puede causar daños irreversibles”, agrega.

El especialista en audición de Comaudi, empresa mexicana especializada en audífonos para sordera, protectores auditivos y materiales acústicos para aislar el ruido en industrias y edificios, refiere que en sus sucursales se realizan revisiones audiológicas gratuitas para toda la familia, a fin de identificar a las personas que presentan reducción en su capacidad auditiva.

“El estudio audiométrico completo permite detectar si una persona tiene problemas de audición con las pruebas de otoscopia, inmitancia acústica, audiometría tonal y logoaudimetría”, comenta.

Tecnología auditiva

Hoy en día, señala, la pérdida auditiva se puede tratar de forma integral y con tecnología de vanguardia, lo que permite recuperar gran parte de la capacidad auditiva.

Los aparatos auditivos digitales que ya se encuentran en el país son minúsculos procesadores electrónicos que cuentan con las certificaciones internacionales de calidad. “Se adaptan mediante un software que permite amplificar de manera precisa cada frecuencia, por lo que cada uno es personalizado, ya que además se fabrican de forma ergonómica de acuerdo a la anatomía del conducto auditivo del individuo”.

Con el apoyo de los aparatos auditivos los pacientes reducen la sensación de aislamiento y soledad; aumenta la seguridad en sí mismos, se evita la irritabilidad y el mal humor, participan más en las conversaciones y reuniones en el caso de los adultos, y en los niños previene problemas en el aprendizaje y lenguaje; en general, mejora su calidad de vida, destaca Jonathan Salomón.

Audición y lenguaje

Las personas que se exponen al ruido por gusto al utilizar audífonos para escuchar música tienen mayor riesgo de pérdida auditiva. “Los artefactos más dañinos son los que van metidos en el conducto, debido atoda la energía y presión sonora alojada en el conducto auditivo y que va contra del oído. La ventaja de los audífonos grandes es que la energía no entra completamente; no obstante, el daño causado por ambos es permanente”, advierte a su vez Ignacio Mora Magaña, presidente del Consejo Mexicano de Comunicación, Audiología, Otoneurología y Foniatría AC.

El también jefe del Departamento de Epidemiología Hospitalaria en el Instituto Nacional de Pertinatología añade que “conforme avanza la edad hay sordera por la exposición al ruido. Este tipo de padecimiento se presenta en personas que trabajan en las plataformas de los aeropuertos y en la industria metalmecánica o textil, donde se genera mucho ruido y se daña la audición. Esto es permanente e irreversible”.

En la población pediátrica, menciona, existen sorderas o problemas de hipoacusia que se dan al momento del nacimiento, porque no se oxigena el cerebro de manera apropiada y se dañan las células encargadas de la audición. “Cuando los niños son más grandes, hay sorderas por problemas infecciosos como otitis medias. Ello requiere tratamiento inmediato, para evitar que se convierta en un problema de largo plazo”, concluye

En Europa, 10 millones de personas podrían quedarse sordas.