3 sectores que acaparan los recursos hídricos en México

Cada vez hay más competencia entre agricultura, industria y abastecimiento público en torno de un recurso indispensable para la vida y la economía de cualquier país.

Martha Mejía
Todo menos politica
Recursos hídricos
Foto: Guadalupe Cervilla/Creative Commons

El agua puede suponer un serio desafío para el desarrollo sostenible, pero gestionada de manera eficiente y equitativa juega un papel clave en el fortalecimiento de la resistencia de los sistemas sociales, económicos y ambientales.

Con ocasión del Día Mundial del Agua 2015 el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, difundió un mensaje internacional en defensa de la correcta gestión de los recursos hídricos.


“Este año en que Naciones Unidas se prepara para aprobar en septiembre una nueva agenda para el desarrollo sostenible después de 2015, el Día Mundial del Agua resalta que dependemos de ella para la salud pública y el progreso equitativo. También es esencial para la seguridad alimentaria y energética. Y sustenta el funcionamiento de las industrias”, señaló Ban Ki-moon.

En este sentido vale la pena destacar que en México 76.6% del agua que se tiene se aplica para la agricultura, 14.5% para el abastecimiento público (uso doméstico, público, urbano) y 4.9% se destina a la industria, siendo estos tres rubros los de mayor importancia para su uso.

Agricultura

La agricultura es el mayor consumidor de agua a nivel mundial, representando casi 70% de las extracciones en todo el orbe, aunque esta cifra varía considerablemente entre países.

De acuerdo con la ONU para 2050 esta actividad tendrá que producir 60% más de alimentos a nivel mundial y 100% más en los países en vías de desarrollo.

En México de cada 100 litros de agua usados 76 se emplean en actividades agropecuarias, 50 provienen de aguas superficiales y 26 del subsuelo.

De acuerdo con el último Censo Agropecuario del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en el país existen 630 mil unidades de producción que cuentan con algún tipo de sistema de riego, de las que 64.4% posee riego con canales de tierra, 25.4% con canales recubiertos, 7.7% con aspersión, 1.3% con microaspersión, 3.3% con goteo y 10.2% con otro tipo de sistema de riego.

Es decir: más de la mitad de las unidades de producción agrícola con riego no cuentan con tecnología que contribuya a optimizar el uso del agua.

José Ramón Ojeda Ledesma, especialista de Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA), señala que derivado de lo anterior es evidente la necesidad de modernizar la red hidroagrícola del país, desde las fuentes de abastecimiento hasta la tecnificación de los sistemas de riego, ya que tan solo 46% del agua destinada llega a las parcelas.

“Frente a este escenario es indispensable la inversión en tecnología orientada a mejorar el uso del agua, que permita incrementar la productividad, rentabilidad y sostenibilidad del sector agrícola”, dice Ojeda.

Abastecimiento público

Ban Ki-moon destaca en su mensaje que uno de los problemas más apremiantes es el acceso al agua potable y a servicios de saneamiento, pues a pesar de los progresos registrados en 2000 casi 750 millones de personas, es decir, uno de cada diez habitantes del mundo, sigue sin tener acceso a mejores fuentes de abastecimiento de agua.

La falta de agua afecta en particular a las mujeres y los niños, ya que no solo pone en peligro su salud sino que además obliga a perder una cantidad considerable de horas en la improductiva y a veces peligrosa tarea de recolectar agua.

De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), de cada 100 litros del vital líquido usados en México 85 se emplean para abastecer a la población, nueve provienen de agua subterránea y seis de agua superficial.

Para evitar escasez de agua México requerirá establecer nuevas políticas y ajustar hábitos de consumo para superar los obstáculos del déficit de vital líquido, informa por su parte la agencia de inteligencia privada estadunidense Stratfor en un reporte publicado en febrero como parte de una entrega sobre la escasez de agua en todo el mundo.

La consultora afirma que si bien en el país no hay falta de agua, al ver el asunto como un todo sí existe distribución desigual, lo que lleva a parte de la población a sufrir carencias graves.

Industria

Es difícil imaginar algún sector industrial en el que no se utilice agua. El agua se emplea para lavar, calentar y refrigerar; generar vapor; transportar substancias o partículas disueltas; como materia prima; como disolvente, y como parte constituyente de productos.

El volumen de agua utilizado por la industria es bajo: constituye menos de 10% del total de extracciones mundiales.

Sin embargo, la industria ejerce una acusada presión sobre los recursos hídricos, no tanto por la cantidad de agua consumida en la propia producción, sino más bien por los impactos derivados de los vertidos de aguas residuales y de su potencial contaminante.

En México de cada 100 litros usados cuatro los utiliza la industria autoabastecida, dos provienen de aguas superficiales y dos del subsuelo.