Ebrard: política sin ética

Carlos Ramírez
Columnas
Marcelo Ebrard
Foto: Cuartoscuro

Acostumbrado a ejercer la política como capricho, ahora se ve que Marcelo Ebrard también hace política sin ética: al colarse en la próxima cámara por la puerta de servicio y escondido con un Juanito, dejó ver muy claro que está urgido de fuero por las irregularidades en la Línea 12.

En su primer intento, Ebrard fue rechazado como candidato porque hizo campaña por dos partidos al mismo tiempo. El dictamen del máximo tribunal electoral determinó que Ebrard había violado la ley. Pero a través del modelo lopezobradorista de Juanito, Ebrard puso a un chalán como propietario y él se anotó como suplente. Una vez jurada la próxima legislatura, su Juanito pedirá licencia y Ebrard quedará como diputado flamante.

Sin embargo, en su sinuoso camino al Congreso Ebrard está dejando una estela de malos mensajes: un político que retuerce la ley para conseguir una curul con todo y dieta. Por tanto, su práctica política estará determinada por esos juegos perversos de poder.

En todo caso, Ebrard es uno de los muchos casos retorcidos de candidatos a diputados. Pero sobre todo, los candidatos son reflejo de la severísima crisis programática de los partidos políticos. Los aspirantes no reflejan una propuesta de partido o una aportación personal, sino que buscan el voto solo por el nombre o la foto.

El electorado estará asistiendo a ciegas a las urnas. Sin embargo, muchos de los que buscan fuero de protección como Ebrard parecen olvidar que el fuero es circunstancial y tiene que ver con acusaciones políticas sin pruebas documentales. En 2009 el PRD metió en la cajuela de un coche al diputado electo Julio César Godoy porque estaba acusado de colaborar con el cártel de Servando Gómez “La Tuta” y solo así pudo tomar juramento como diputado y conseguir fuero. Pero la insistencia de la Procuraduría General de la República y las pruebas documentales abrieron un proceso legal contra el diputado Godoy y la cámara baja y el PRD se vieron en la penosa necesidad de realizar un juicio de procedencia para quitarle el fuero y poder ejercer la orden de aprehensión. Pero todavía el PRD le hizo el favor a Godoy de permitir su fuga y hasta la fecha es prófugo de la justicia.

Responsabilidad


De ahí la percepción legal de que el fuero legislativo no le servirá de mucho a Ebrard si las autoridades capitalinas y federales —dependiendo del fincamiento de responsabilidades por fraudes en la Línea 12— acumulan las pruebas suficientes y solicitan a la cámara un juicio de procedencia para desaforar a Ebrard y ejercer órdenes de aprehensión.

Pero al margen de los procedimientos judiciales y políticos, los legisladores que hacen las leyes debieran ser los primeros en cumplirlas y no los primeros en romperlas. Mal mensaje está dejando Ebrard al retorcer las leyes para conseguir una chamba de legislador, y peor ciertamente estará Movimiento Ciudadano al vender políticamente una candidatura y permitir los juegos perversos de Ebrard para colarse en la cámara baja por la vía de un Juanito.

El deterioro de la calidad de la política es responsabilidad de los partidos y políticos al jugar con el poder solo para beneficio personal, pero también de los ciudadanos que no razonan su voto en función de los comportamientos de los candidatos. Habrá que ver si Movimiento Ciudadano y Ebrard logran el aval de los electores y acumulan 3% de los votos o enfrentarán el repudio político con el rechazo de votos.