5 jugadores que prefirieron el ‘fair play’ que conquistar la gloria

En la lista destaca el mexicano Adrián Domínguez

Juan Carlos Ponce
Todo menos politica
Futbol
Foto: Martin Young/Creative Commons

Andrés Guardado no tuvo el valor para protagonizar un gesto de “fair play” en el juego polémico donde México venció 2-1 a Panamá en las semifinales de la Copa Oro.

El atacante mexicano anotó un penal “regalado” por el árbitro estadounidense Mark Geiger, cuando un gran número de aficionados pedía que lo fallara.

El gol sirvió para que el Tri lograra el empate minutos antes del final del partido y alargara el encuentro a tiempos extras, donde con otro penal amarró su pase a la final.

Aunque Guardado decidió meter el gol, en la historia del futbol hay jugadores que pusieron en alto el “fair play” antes que el minuto de “gloria”.

Adrián Domínguez

Mauricio Gallaga, técnico de Estudiantes Tecos Sub-20, ordenó al delantero Adrián Domínguez fallar un penal que se marcó luego de que su equipo no devolvió el esférico a Pachuca, equipo que había sacado el balón para que atendieran a un jugador lesionado.

El jugador obedeció a su entrenador y mandó el esférico fuera del campo. Esta acción de integridad se registró en un campo de la Universidad del Futbol en el 2012.


Morten Weighorst

El futbolista danés también falló un penal a propósito luego de que el árbitro marcara la pena máxima cuando un jugador iraní tomó, por descuido, el balón con la mano.

Antes de cobrar el penal, Weighorst charló con el técnico danés Morten Olsen y tomaron la decisión de errar el disparo porque la falta fue marcada por error.

El acto de honestidad tuvo lugar en el juego entre las selecciones de Irán y Dinamarca en el partido inaugural de la Copa Carlsberg, en 2003.

Miroslav Klose

El delantero alemán demostró su categoría cuando pidió al árbitro anular un gol que metió con la mano en un juego entre Lazio y Napoles de la Liga italiana, en 2012.

Aaron Hunt

El mediocampista alemán habló con el árbitro del encuentro entre Werder Bremen y Nuremberg, para que no cobrara un penal a favor de su equipo, porque se dejó caer en el área.

Esto sucedió en un encuentro de la Liga alemana en 2014.

Costin Lazar

Lazar demostró su ética profesional al confesarle al árbitro que se equivocó al pitarle un penal a favor. Los hechos tuvieron lugar en el juego donde Rápid Bucarest se impuso 4-0 al Otelul en la Liga de Rumania, en 2009.