TPP: más oscuros que claros

México competirá con países tan disímbolos como Estados Unidos y Brunei o como Vietnam, la potencia maquiladora en textiles.

Alberto Barranco
Columnas
Puerto en Cancún
Foto: Cuartoscuro

En el concierto de opacidad sobre lo negociado bajo el marco del Acuerdo Transpacífico de Asociación Económica (TPP, por sus siglas en inglés) se ha filtrado una nota que plantea un escenario que linda con el autoritarismo del principal promotor del pacto de doce naciones: a solicitud de Estados Unidos se fijó una cláusula que habla de abrir el telón a rajatabla en dos años, bajo la condición de que el documento final sea apoyado por la mitad de los países.

La cláusula habla de que estos representen más de 85% del Producto Interno Bruto del bloque… que representa a su vez 27% del mundial, con un mercado de 812 millones de potenciales compradores.


El caso es que Estados Unidos y Japón tienen solos 80.4% del potencial y se ubican, justo, como los más interesados en el concierto mercantil.

Si el TPP lo aprueban Brunei, Canadá, Australia y Nueva Zelanda, por ejemplo, este se pondría en escena a contrapelo del resto de los países, es decir, México, Perú, Vietnam, Malasia, Chile y Singapur.

Si bien el país del norte no logró iniciar la negociación bajo la cobertura del fast track o vía rápida, que obliga al Congreso a aceptar o rechazar en bloque la negociación, esto es, sin posibilidad de quitarle o ponerle alguna coma, la Casa Blanca le dio la vuelta al primer rechazo, logrando una figura similar colocada por la puerta de atrás.

Disímbolos

Aunque México no tiene la figura jurídica, el Senado está en la misma ruta: lo tomas o lo dejas, por más que la segunda posibilidad sería utópica, garantizado el voto priista, panista, verde y de Nueva Alianza.

Lo único que podría ganar la oposición al acuerdo mercantil es tiempo… si bien en dos años llegaría el sí automático por mayoría de países.

El documento final, de acuerdo con lo pactado, se convierte en ley suprema, lo que implica que se anulen todas las leyes u ordenamientos que pudieran oponérsele. El abanico oscila desde la Ley Aduanera hasta las que protegen la propiedad intelectual, pasando por pesas y medidas, ordenamientos fitosanitarios…

México competirá con países tan disímbolos como Estados Unidos y Brunei o como Vietnam, la potencia maquiladora en textiles y vestido que basa su posibilidad en salarios de 150 dólares al mes y jornadas de doce horas los siete días de la semana.

En el escenario, Malasia y Singapur podrían triangular mercancías de otras naciones asiáticas a contrapelo de la regla de origen.

Y con Japón la nación se juega en un volado su hegemonía en el mercado automotriz de Estados Unidos, en tanto con Australia y Nueva Zelanda la sobrevivencia de las empresas productoras de leche y de pasadita las del sector azucarero.

En el escenario de chile, de dulce y de manteca, aunque el país tiene una balanza supervitaria con el bloque por 101 mil millones de dólares, si se excluye de este a Estados Unidos, Canadá, Perú y Chile, el balance resulta deficitario en 25 mil 942.

Por lo pronto, el grueso de lo negociado está en el cuarto oscuro.