Un inmigrante mexicano fue dejado en libertad tras permanecer 16 años de prisión por un delito que no cometió, informaron autoridades judiciales.
Luis Lorenzo Vargas fue sentenciado a 55 años de prisión en 1998, acusado como el “violador de la lágrima”, que abusó de mujeres en un suburbio de Los Angeles en la década de los años 90.
Vargas, quien era residente legal en Estados Unidos y originario de Tijuana, México, perdió su calidad migratoria en este país por lo que tras ser dejado en libertad, fue entregado al Servicio de Inmigración y Ciudadanía.
El lunes, cuando fue exonerado por el juez William Ryan, el mexicano de 46 años solo movió la cabeza y estalló en llanto.
El programa The Innocence Project revisó el caso y encontró fallas en el proceso y en 2012 solicitó que se realizaran nuevas pruebas de ácido desoxirribonucleico (ADN) que comprobaron la inocencia de Vargas.
El verdadero “violador de la lágrima”, quien no ha sido detenido, está vinculado con al menos 39 asaltos sexuales en el área de Los Angeles desde 1995.
Luis Lorenzo Vargas breaks down in court as he is exonerated for sexual assaults. He spent 16 years in jail. #Law pic.twitter.com/onR8GI6J5G — Francine Orr/LATimes (@francineorr) noviembre 23, 2015
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