Humano, demasiado humano

Este 2015 marcó el momento cuando por primera vez en México más de la mitad de la población tuvo acceso a internet

Juan Pablo Delgado
Columnas
este 2015 marcó el momento cuando por primera vez en México más de la mitad de la población tuvo acceso a internet
Foto: Serge Kij/Creative Commons

No sé si ustedes se enteraron, pero este 2015 marcó el momento cuando por primera vez en México más de la mitad de la población tuvo acceso a internet. Esto es un triunfo inmenso, quizás a la altura de la alfabetización masiva o el acceso a la salud alcanzado en el siglo pasado.

Porque nadie puede negarlo: internet es por mucho el invento más extraordinario e importante de la especie humana.

Sería inútil enumerar aquí las razones de por qué esto es verdad y seguro ustedes las conocen. Pero basta con decir que es tan útil y necesario en la vida contemporánea, que algunos países han hecho del acceso a internet parte de los derechos humanos.

Sin embargo, basta con echar un breve vistazo al panorama digital para darse cuenta de que aquí, en nuestro México, las cosas no van tan bien: la población mexicana parece no estar aprovechando al máximo esta herramienta revolucionaria.

Les propongo algo: pasen un par de minutos en cualquiera de las redes sociales para darse cuenta de cómo todos parecen estar obsesionados con bebés, memes de John Travolta, videos de gatos que hacen tonterías o fotos de cachorros bonitos.

¿Qué significa todo esto? ¿Cómo es posible que teniendo frente a nosotros la herramienta tecnológica más impresionante de la historia hayamos terminado en este nivel tan bajo?

Es por ello que decidí llegar al fondo de este asunto e intentar responder la pregunta más importante: ¿qué uso le están dando realmente los mexicanos a internet?

Sorpresa

Para resolver este embrollo les propongo un experimento sencillo: un juego que demuestra el pavoroso estado al que hemos llegado como sociedad digital. Y no se preocupen, es un juego que pueden jugar en familia y seguramente los mantendrá cautivados por muchos minutos en estas vacaciones.

¿De qué trata el juego? Pues las reglas son muy simples: basta con acceder a la página de Google Trends, elegir “México” como país de análisis y teclear la palabra “porno”. Aquí podrás ver cuántas veces se ha buscado este término en Google durante diversos periodos: hay que elegir “últimos doce meses”. El juego entonces es muy fácil: todos los participantes deben proponer una palabra que compita contra “porno” y el que encuentre alguna que lo supere en búsquedas… ¡gana un premio!

Hasta el momento, yo solo he encontrados tres palabras ganadoras: “Facebook”, “YouTube” y, por alguna extraña razón, “Google”, o sea que hay gente que entra a Google para buscar “Google” (cada quien sus locuras).

Ahora bien, no quiero que me malinterpreten, pues aquí no pretendo ser mojigato ni moralista. Nada tiene de malo utilizar internet para darse una escapada pornográfica de vez en cuando. Pero por bondad, señores: ¡hay que balancear! Porque con los resultados que nos arroja Google Trends, parece que somos una sociedad ultrasexualizada, con una fijación total en los videos XXX. ¡Vamos muy mal!

Así que solo queda preguntar: si la gente se la pasa buscando mayoritariamente pornografía, ¿para qué celebrar tanto el aumento del acceso a internet?

¡Pues no lo sé! Por ahora, lo único que queda es esperar a que 2016 nos arroje mejores resultados. Eso sí, creo que ya nadie se puede hacer el tonto: ya todos sabemos lo que millones de mexicanos andan buscando en internet a altas horas de la noche.

¡Feliz inicio de año, compañeros!