El Instituto Nacional de Perinatología Isidro Espinosa de los Reyes informó que no se ha registrado ninguna muerte materna desde 2015, debido a la contribución de la obstetricia que está encargada de la atención de los embarazos, partos y periodo de puerperio.
Al respecto, el jefe del Departamento de Obstetricia de ese nosocomio, Mario Rodríguez Bosch, explicó que esta área de la medicina ha permitido la reducción de la morbimortalidad materna y perinatal porque está dedica a atender embarazos complicados y de alto riesgo.
En el Día Mundial de la Obstetricia, el especialista informó que México reporta al menos 2.5 millones de nacimientos al año y en lo que va del presente año hubo 447 fallecimientos de mujeres por complicaciones en el embarazo o durante el parto.
Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que cada minuto muere una mujer en el mundo por dificultades en alguna de las dos etapas mencionadas, y defunciones pueden evitarse con las debidas atenciones de salud impartidas por las obstetras.
En el país, abundó Rodríguez Bosch, la principal causa de muerte materna es por hemorragias obstétricas, 25%, y por preeclampsia, 18 por ciento.
El experto indicó en un comunicado que el instituto también atiende casos con problemas de lupus y cardiopatías asociadas a la gestación, cuyas patologías aumentan la probabilidad de fallecer en este periodo por circunstancias graves.
En embarazos de muy alto riesgo, ejemplificó, el hospital suele coordinarse con otros institutos, como el de Cardiología, para concluir con éxito el embarazo.
En el Instituto Nacional de Perinatología se han puesto en práctica herramientas para monitorear la evolución del trabajo de parto, además de la madre y el feto durante su labor, puntualizó.