Deben regular más los gobiernos para poder crecer: UNCTAD

Advierte que los países en desarrollo cada vez son más vulnerables a la volatilidad de los mercados financieros mundiales

Redacción
Política
Mukhisa Kituyi
Foto: jean-Marc Ferre?

Para que la economía mundial vuelva a crecer los gobernantes necesitan aplicar políticas macroeconómicas audaces, reforzar la regulación de las finanzas y aplicar políticas activas de industrialización, sugiere la Conferencia de Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD).

En su informe anual “Comercio y Desarrollo” la organización argumenta que la ralentización de las economías desarrolladas es el mayor lastre para el crecimiento global, pero que los países emergentes están atrapados en la tendencia descendente.


El informe recuerda que el crecimiento este año en Estados Unidos y en la eurozona será entorno de 1.6%, mientras que se estancará en Japón.

Los expertos puntualizan que se desconoce el impacto que el Brexit tendrá en las economías británica y europeas y el posible efecto de contagio.


El lento crecimiento en los países ricos está afectando a las naciones en desarrollo, que de media crecerán 4% este año, lo que significa 2.5 puntos porcentuales por debajo de los índices precrisis.

El informe recuerda, no obstante, que hay variables entre los países y regiones en desarrollo y pone como ejemplo el hecho de que Latinoamérica esté en recesión mientras que Asia sigue creciendo, aunque a unos niveles menores que en años precedentes.

Ante esta realidad, los economistas de la UNCTAD advierten de que “no se sorprenderían” si el crecimiento mundial cayera por debajo de 2.5% registrado en 2014 y 2015.

“Los líderes políticos del mundo afrontan una combinación de poca inversión, caída de la productividad, comercio estancado, crecimiento de la desigualdad y aumento de los niveles de déficit”, expresó el secretario general de la UNCTAD, Mukhisa Kituyi.

“Las soluciones (a este panorama) requieren que se piense de forma ambiciosa, y no seguir actuando como hasta ahora”, agregó.

El informe destaca que las inversiones siguen estancadas y las grandes empresas no reinvierten sus beneficios en capacidad productiva o empleos.

De hecho, el texto indica que la inversión en el sector privado es 3% menor ahora que hace 35 años.

La UNCTAD advierte que los países en desarrollo cada vez son más vulnerables a la volatilidad de los mercados financieros mundiales y que la desregulación financiera en las economías emergentes está causando que se reduzca considerablemente la proporción entre los beneficios y la inversión.

Asimismo, la entidad alerta que en la segunda mitad de 2016 existe el riesgo de una espiral deflacionista, con fuga de capitales y devaluación de monedas, lo que provocaría una reducción de los ingresos de los gobiernos.