Medidas para controlar la EPOC

Fumar aumenta en 90% el riesgo de desarrollar la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC)

Lorena Ríos
Todo menos politica
Enfermedad de epoc
Foto: Decade3d

Las exacerbaciones o empeoramiento agudo de síntomas como sensación de ahogo (disnea), tos crónica y flemas son los episodios respiratorios más preocupantes en quienes viven con Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), ya que genera pérdida de productividad, discapacidad, años-vida y muerte prematura.

Si bien el impacto clínico de estos eventos se puede controlar a través de una intervención terapéutica oportuna y adecuada con broncodilatadores inhalados de acción prolongada como el tiotropio, la falta de adherencia a los medicamentos es el principal motivo de fracaso terapéutico.

Por ello, en el marco del Día Mundial de la EPOC, a celebrarse el 16 de noviembre, la Organización Mundial de la Salud (OMS) hace un llamado a la comunidad médica para poner énfasis en la educación del paciente, sobre todo cuando se trata de seguir un tratamiento farmacológico de largo plazo.

De acuerdo con Marco Antonio Loustaunau Andrade, neumólogo adscrito al ISSSTECALI de Mexicali, Baja California, una de cada dos personas con EPOC no siguen el tratamiento debido, principalmente, al desconocimiento de la enfermedad y a que siguen prevaleciendo mitos e ideas erróneas que dificultan el control, de ahí la importancia de empoderar a quienes viven con esta condición de salud.


A nivel mundial se estima que la EPOC afecta a 210 millones de personas, mientras que en México la padecen 8% de la población mayor de 40 años de edad y al año cerca de 23 mil personas fallecen por su causa.

La EPOC, comentó, supone para el afectado una limitación en su actividad diaria, frecuentes visitas médicas de seguimiento, urgencias y hospitalizaciones con su consecuente carga económica (el gasto por exacerbación supera los 139 mil pesos anuales) y social. Debido a ello, el autocuidado es un término aplicado a los programas de enseñanza para hacer que los pacientes sigan el tratamiento médico y modifiquen conductas de riesgo.

Loustaunau Andrade apuntó que desde el diagnóstico, a través de una espirometría (prueba que mide la cantidad de aire que sale y entra de los pulmones), el neumólogo debe explicar al paciente y a su familia qué es la EPOC y cómo impactará en su vida cotidiana considerando sus creencias, dudas y necesidades, qué tipo de terapia se le dará, cuál será su función y cómo usar apropiadamente su dispositivo inhalador.

“Como es una condición incurable, los objetivos terapéuticos se enfocan en atenuar los síntomas, reducir las complicaciones, enlentecer la progresión de la enfermedad y, sobre todo, asegurar el apego al tratamiento para mejorar la calidad de vida, pues hemos observado que con frecuencia muchos pacientes olvidan aplicar su medicamento o lo abandonan por sus efectos secundarios, porque se sienten mejor o porque su dispositivo inhalador es muy complicado”, explicó.

“Mientras los medicamentos de rescate actúan de inmediato para sacar a un paciente de una crisis, los tratamientos de mantenimiento como tirotropio controlan los síntomas de la EPOC a largo plazo para evitar que estos eventos de angustia se presenten, de modo que deben utilizarse diariamente aun cuando tenga la sensación de que los síntomas están controlados”, aclaró el especialista.

Finalmente, el neumólogo destacó que el manejo de la EPOC debe incluir una serie de medidas para erradicar factores de riesgo como el tabaquismo y el uso de combustibles de biomasa; atender de forma precoz la ansiedad, la depresión y otras enfermedades asociadas; instalar la espirometría de forma rutinaria en el consultorio para un diagnóstico oportuno y actualizar a la comunidad médica tanto en la interpretación de los datos que esta prueba arroja como en las innovaciones terapéuticas disponibles, entre ellas la doble broncodilatación para un abordaje correcto y personalizado.