Amnistía a rebeldes si entregan las armas: Bashar al Assad

La promesa del presidente de Siria se da a cuatro días de las conversas de paz en Astana, Kazajistán

Redacción
Política
Bashar al Assad
Foto: AP

El presidente sirio, Bashar al Assad, reiteró su promesa de amnistiar a los grupos rebeldes que se unan a la actual frágil tregua y entreguen sus armas, a cuatro días de las conversaciones de paz para Siria en Astana, capital de Kazajistán.

“Confío en que los rebeldes que asistan a las conversaciones en Astana acepten entregar sus armas a cambio de un acuerdo de amnistía”, dijo Al Assad en entrevista a una televisora japonesa.


El mandatario sirio indicó que la prioridad de las negociaciones será reforzar el alto al fuego vigente en Siria desde el pasado 30 de diciembre con el fin de proteger la vida de los civiles y garantizar el envío de ayuda humanitaria a distintas zonas sirias.

“En este momento, creemos que la cita en Astana será en forma de conversaciones entre el gobierno y los grupos rebeldes con el fin de mantener la tregua y permitir que estos grupos se unan a los acuerdos de reconciliación en Siria, entregando sus armas”, declaró Al Assad.


Asimismo, expresó su esperanza de que las conversaciones sean una plataforma donde se pueda discutir “de todo” con los rebeldes sirios, pero que no tiene claro si servirá para establecer un diálogo político, ya que “no está claro quién va a participar”.

La reunión en Astana, que se celebrará el 23 de enero con la mediación de Rusia, Irán y Turquía, es parte de un paquete de iniciativas mencionadas en la Resolución 2336 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas sobre la tregua en Siria, que entró en vigor el pasado 30 de diciembre.

El enviado especial de las Naciones Unidas para Siria, Staffan de Mistura, será el encargado de representar a la organización.

El conflicto sirio, que inició el 15 de marzo de 2011 con una protesta contra el régimen de Al Assad y se convirtió en una guerra civil, ha dejado más de 310 mil muertos, más de dos millones de heridos, además casi doce millones de desplazados internos y refugiados en otros países.