Una vez más ISIS destruyó antigüedades en Palmira

Autoridades sirias están tratando de verificar si han dañado el teatro romano de la urbe  

Redacción
Política
Palmira-ISIS
AP

El director de Museos de la Dirección General de Antigüedades, Ahmad Dib, informó que el grupo terrorista autodenominado Estado Islámico una vez más destruyó ruinas grecorromanas en la ciudad monumental siria de Palmira, que son Patrimonio Mundial de la UNESCO.

“Tenemos informaciones sobre que ISIS causó destrozos, pero nos faltan por confirmar los detalles”, indicó.


Dib explicó que las autoridades sirias están tratando de verificar si han dañado el teatro romano de la urbe, como han informado algunos medios locales y recordó que los yihadistas asesinaron el jueves a varias personas en ese teatro.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos señaló que en las últimas 48 horas no se ha registrado ninguna explosión en la parte arqueológica de la localidad ni en sus alrededores.


La ONG afirmó que el pasado 11 de enero los extremistas ocasionaron daños en la parte frontal del teatro romano cuando colocaban explosivos en la zona.

Los yihadistas retomaron Palmira el 11 de diciembre, días después de lanzar una ofensiva contra posiciones del Ejército sirio en el este de la provincia central de Homs, donde se localiza la urbe monumental.

La primera vez que los yihadistas conquistaron la población fue el 20 de mayo de 2015, pero fueron expulsados diez meses después por los soldados sirios, apoyados por la aviación rusa.

Durante su primera etapa en Palmira, el EI convirtió la zona de las ruinas grecorromanas en un campo de minas, que más tarde zapadores rusos se encargaron de eliminar cuando los efectivos gubernamentales sirios se hicieron con su control.

Además, los yihadistas dinamitaron los templos de Bel y de Bal Shamín, así como el Arco del Triunfo, y destruyeron varias estatuas del museo de la ciudad.

Palmira fue en los siglos I y II dC. uno de los centros culturales más importantes de la época y punto de encuentro de las caravanas en la Ruta de la Seda, que atravesaban el árido desierto del centro de Siria.