Washington, 17 mar.- Dos terceras partes del público de Estados Unidos prefiere una reforma migratoria con legalización más que las deportaciones del presidente Donald Trump, señaló hoy un nuevo sondeo de la cadena CNN/ORC.
Desde el inicio de su administración, Trump puso en vigor nuevas directrices de detención y deportación de inmigrantes indocumentados, y apenas la víspera solicitó recursos para más espacios de reclusión, más agentes migratorios y un muro fronterizo.
“Pero la encuesta de CNN/ORC encontró que el público estadunidense está en realidad moviéndose en una dirección opuesta a la de Trump desde que éste ganó la elección”, señaló la cadena televisiva.
Un 86 por ciento de los demócratas, un 71 por ciento de los independientes y un 55 por ciento de los republicanos se oponen a la idea de deportar a todas las personas que viven ilegalmente en Estados Unidos.
Asimismo un 60 por ciento de los encuestados sostuvo que la prioridad número uno de la administración Trump debe ser desarrollar un plan para legalizar a millones de inmigrantes indocumentados.
En contraste, sólo un 26 por ciento coincide con Trump en que la prioridad debe ser detener los cruces fronterizos ilegales y sólo un 13 por ciento considera que las deportaciones deben ser la mayor prioridad del gobierno federal.
El número de personas que dan prioridad a la legalización para aquellos que trabajan en Estados Unidos sin documentos se incrementó en un 51 por ciento desde el año pasado.
La cadena CNN encontró que el punto de vista de los estadunidenses sobre la legalización de inmigrantes indocumentados es compartido entre demócratas, republicanos e independientes.
Durante su primer informe de gobierno ante el congreso de Estados Unidos, el presidente apoyó la idea de una reforma migratoria, pero no ofreció detalles sobre las características de un posible acuerdo bipartidista.
La encuesta hizo notar que es inmensamente popular en Estados Unidos ofrecer una ruta a la ciudadania a aquellos inmigrantes que han estado viviendo ilegalmente en Estados Unidos, pero que tienen trabajo, hablan inglés y están dispuestos a pagar los impuestos atrasados.
Un 90 por ciento de la población estadunidense en general apoya esa posible reforma migratoria con lo de la ciudadanía, incluidos 96 por ciento de los demócratas, 89 por ciento de los independientes y 87 por ciento de los republicanos.
La encuesta encontró que los estadunidenses están más preocupados por los efectos humanitarios de las deportaciones que por los delitos.
Un 58 por ciento expresó su preocupación de que las deportaciones vayan demasiado lejos y resulten en la remoción de personas que no han cometido crímenes serios.
La encuesta incluyó entrevistas con mil 25 adultos del 1 al 4 de marzo y tiene un margen de error de menos o más cuatro puntos porcentuales.