Impuesto fronterizo traería consecuencias nocivas

Antonio Caporal
Nacional
Senado
Senado de la República

El mismo día que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó dos órdenes ejecutivas en materia de migración y seguridad fronteriza, el vocero de la Casa Blanca, Sean Spicer, dijo que México pagaría por el muro a través de distintas alternativas como la de instaurar un impuesto de 20% sobre productos importados mexicanos.

Tras ser cuestionado sobre el impacto para los consumidores estadunidenses, Spicer aclaró que se refería a la propuesta de reforma tributaria que el Partido Republicano presentó en el Congreso, en 2016, y que propone un cambio de régimen fiscal para las empresas, incluyendo el impuesto al flujo de dinero con ajuste fronterizo.


Para el Centro de Estudios Internacionales Gilberto Bosques (CEIGB), la reforma representaría un cambio radical en la forma que opera el sistema tributario en las empresas estadunidenses y tendría efectos potencialmente nocivos en la competitividad regional y, especialmente, sobre el comercio bilateral con México, considerando la concentración de su comercio con EU.

Además, el ajuste fronterizo alteraría los términos del acuerdo bilateral para evitar la doble tributación y del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).