Hoy parece que hemos volcado nuestra atención a la inteligencia artificial, nos preocupamos por llegar a ser superhombres y por trascender con ayuda de las máquinas. Quizá nos hemos olvidado de la inmensa perfección que representan nuestros cuerpos por el simple hecho de haber encarnado en ellos. Olvidamos lo preciado que es nuestro ser y menospreciamos lo que ya somos, por tratar de mejorar la especie a través de la tecnología.
Diariamente en las noticias vemos novedades que hablan acerca de la inteligencia artificial, pero ¿por qué nadie recuerda a la inteligencia biológica?
Así es, algo que nos es heredado, algo que sencillamente ya está dado. Esta inteligencia es sigilosa e inconsciente para muchos de nosotros. ¿Acaso le enseñamos a nuestro cuerpo cómo crecer el pelo? ¿O practicamos de manera consciente defendernos de enfermedades?
La inteligencia biológica engloba a todo el sistema inmunológico, le enseña al cuerpo a atacar a virus y agentes extraños, pero es mucho más que ello. Es algo tan inmenso y tan complejo como el impulso que nos mantiene vivos; es lo que le enseña a nuestros cuerpos a hacer lo que diariamente tienen que hacer. Engloba desde la parte genética hasta la sique humana. Está conectada y contiene toda la información de cada sistema que usamos. De ella dependen los sistemas cardiovascular, hormonal, muscular e interconecta a todos y cada uno de ellos.
En el caso del ser humano la inteligencia biológica ayuda a la supervivencia de nuestra especie y ha sobrevivido a todo tipo de inclemencias en el planeta Tierra, desde asteroides hasta volcanes y toda clase de plagas. A pesar de que muchas especies se han extinto, la nuestra sigue aquí; y la razón de ello es que la inteligencia biológica nos ha construido para sobrevivir. Este sistema se basa en la contingencia y el azar, asevera Stephen Jay Gould, biólogo experto en evolución. Esto quiere decir que estamos diseñados para sobrevivir estrés que aún no ha llegado y quizá jamás nos toparemos en el camino.
Cuestionamiento
Algo realmente interesante de esta inteligencia es que no solamente opera dentro de nosotros sino que forma parte de un ecosistema; y curiosamente ese ecosistema vive en todos y cada uno de nosotros.
¿Sabías que en los intestinos alojamos a por lo menos 40 trillones de bacterias? Esto ayuda a la digestión, al cambio de humor y también a la lucha contra enfermedades. De hecho, cada ser humano aloja diez veces más células ajenas al cuerpo y la encargada de gobernarlas es la inteligencia biológica.
Debido a que quizá no estamos conscientes de la maravilla que tenemos dentro de nosotros, ni siquiera somos capaces de saber el potencial que podemos desarrollar y esto representa la perfección de un sistema que se ha construido en el azar. Así que ahora quisiera que tomemos un minuto para reflexionar las posibilidades que somos, en cada célula de nosotros yace un sistema capaz de sobrevivir a casi todo.
Y por eso me cuestiono ahora que sé un poco más de esto: ¿será que la inteligencia artificial pueda superar todo este potencial?