El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) exhortó a la población acudir al médico ante los primeros síntomas de dengue, entre ellos un fuerte dolor de huesos, muscular o de articulaciones.
El especialista de la UMF 48 del IMSS en Jalisco, Juan José Atilano García, afirmó que recibir tratamiento oportuno beneficia al paciente y ayuda a focalizar colonias en donde la Secretaría de Salud (SSJ) realiza fumigaciones para acabar con el mosquito Aedes aegypti.
Comentó que durante la temporada de lluvias aumenta la presencia del mosquito transmisor del dengue, chikungunya y zika, por lo que además de evitar su proliferación en los domicilios se recomienda acudir a la unidad médica más cercana ante los primeros síntomas de estas tres enfermedades.
El epidemiólogo de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) 48 añadió que de esta forma también los afectados podría colaborar con las autoridades sanitarias para detectar áreas de mayor riesgo.
Consideró que el problema es que este insecto se ha adaptado muy bien al ser humano, vive en las ciudades, en las calles, en las casas, y se reproduce en floreros, contenedores de agua, incluso llantas o corcholatas.
“Conforme se ha visto expuesto a sustancias químicas se ha hecho un poquito más resistente, por eso es importante la colaboración de todos”, reiteró el médico del Seguro Social.
Aclaró que si la persona es derechohabiente del IMSS será atendida en su UMF correspondiente y un médico podrá hacer el diagnóstico diferencial para determinar si la persona tiene dengue, chikungunya o zika.
Agregó que el objetivo es otorgarle un tratamiento adecuado, a la vez que la SSJ acude en brigadas preventivas a la colonia de donde proviene el caso, lo mismo para fumigar por las noches que para ayudar a las familias a descacharrizar sus patios y eliminar criaderos del mosquito.
“Hay que tomar en cuenta que un huevecillo puede permanecer sin agua un año sobre una superficie, por eso cuando inicia la temporada de lluvias vemos salir estos insectos aparentemente de la nada.
Para prevenir lo anterior, es necesario que cambiemos constantemente el agua de los floreros cada dos o tres días y tallemos bien la superficie de este u otros contenedores de agua. También hay que mantener cerrados los depósitos de agua del baño y los tinacos”, destacó.