Julión y Márquez

La forma en que está actuando el gobierno de Estados Unidos es muy injusta

Sergio Sarmiento
Columnas
Acusaciones
Foto: NTX

La noticia llegó de sorpresa y vino de fuera. El 9 de agosto se dio a conocer una de esas listas con las que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, no el Departamento de Justicia, anuncia sanciones a personas que presuntamente tienen lazos financieros con narcotraficantes. En esta lista aparecieron el cantante Julión Álvarez y el futbolista Rafael Márquez, en medio de otra veintena de nombres.

Tan grande fue la sorpresa que la Presidencia de la República tuvo que apresurarse a retirar de Instagram una foto, subida apenas el 7 de agosto, en la que el presidente Enrique Peña Nieto aparecía con Julión Álvarez y el gobernador de Chiapas, Manuel Velasco, en un paseo en lancha por el cañón del Sumidero.

Ni Julión Álvarez, que dio declaraciones a través de Facebook diciendo que quizá la acusación era por envidia, ni Rafa Márquez, quien se presentó de manera voluntaria a declarar en la PGR, estaban escondidos.

Nadie puede soslayar la importancia de la decisión del Departamento del Tesoro de colocar a estos dos personajes mexicanos en una lista de personas “especialmente designadas” por su relación con el narcotráfico. El daño a la reputación de ambos, pero especialmente de Márquez, un futbolista en activo que ha sido capitán de la selección nacional y de quien se esperaba pudiera asistir todavía a la Copa del Mundo de Rusia 2018, es devastadora.

Vale la pena señalar que ningún fiscal en Estados Unidos o en cualquier otro lugar del mundo ha presentado acusaciones concretas acompañadas de pruebas en contra de cualquiera de los dos. La colocación de Rafa y Julión en la lista del Departamento del Tesoro se realiza por una supuesta relación como prestanombres de Raúl Flores Hernández, un hombre que enfrenta, él sí, acusaciones formales por narcotráfico en Estados Unidos.

Sin pruebas

Si algún fiscal en Estados Unidos tuviera realmente pruebas contra alguno de los dos no se les habría colocado en una lista de supuesta relación, sino que se habrían presentado cargos formales en su contra y habrían sido detenidos. De alguna manera, la forma en que está actuando el gobierno de Estados Unidos es muy injusta. La acusación se presenta sin someter pruebas y sin permitir a los acusados presentar pruebas de descargo.

La PGR ha señalado que actúa de manera conjunta con el Departamento del Tesoro de Estados Unidos para verificar si realmente hay una relación indebida de Julión y Rafa, así como de otras personas incluidas en la lista, con el presunto narcotraficante. Tan el gobierno mexicano no sabía que esa investigación se llevaba a cabo en la Unión Americana, que se subió la foto con el cantante a Instagram.

Esperemos que las autoridades de Estados Unidos y de México realmente presenten pruebas y que estas sean contundentes. Si los señalados son responsables de algún ilícito, que se den a conocer todos los elementos que llevaron a la sospecha y a las acciones en su contra.

Pero si estas pruebas no son suficientes, ojalá que el “Usted disculpe” del Departamento del Tesoro sea tan claro y notorio como la acusación que se ha hecho. Manchar la reputación de un hombre que se ha dedicado al deporte toda su vida, y lo ha hecho con tesón y aparente honestidad, y hacerlo sin pruebas, sería algo incalificable. Pero lo incalificable se vuelve cada vez más una parte de la vida cotidiana.