El secretario de Turismo Federal, Enrique de la Madrid Cordero, encabezó el homenaje que a través del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) la Sectur rindió a Enrique Carbajal González, Sebastián, al cumplir 50 años como escultor, creador de importantes piezas artísticas a nivel nacional e internacional y cuyo trabajo cultural es reconocido internacionalmente.
De la Madrid Cordero, entregó un reconocimiento al escultor chihuahuense y destacó
es el autor de la Flor de Desarrollo, emblema de Fonatur creado hace casi dos décadas, y que hoy en día representa la floreciente industria del turismo, e identifica ocho destinos y a la sede de la institución.
Reconoció la aportación del escultor al sector turístico pero también a favor del placer estético plasmado en sus múltiples obras que a lo largo y ancho del territorio nacional se pueden disfrutar y también en otras latitudes como Japón.
Por su parte, Miguel Alonso Reyes, Director General de Fonatur, agradeció a Sebastián la creación de la Flor del Desarrollo, el emblema de la institución diseñado en 1998, que “hoy representa a nuestros destinos ante el turismo internacional y nacional. Hablar de la escultura del maestro Sebastián es hablar de la floreciente industria del turismo, es a partir de este emblema como todos nos identificamos en la actividad turística del país”, recalcó.
Destacó que esta obra de arte se convirtió en insignia e imagen de Fonatur y sus destinos por su belleza y fuerza interpretativa, y que las nueve esculturas en Cancún, Ixtapa, Los Cabos, Loreto, Huatulco, Cozumel, Litibú, Playa Espíritu y las oficinas centrales, se integran a la perfección con la naturaleza y el paisaje, convirtiéndose en un referente que llevan en su mente habitantes, visitantes e inversionistas de los destinos turísticos de clase mundial.
La primera escultura de Sebastian fue instalada en 1999, para celebrar el 25 aniversario de Fonatur, encargada por su entonces director general Alfredo del Mazo González, elaborada en fierro con esmalte acrílico y con una altura de 14 metros.
Los cinco pétalos de la pieza representan los cinco Centros Integralmente Planeados (CIP) de Fonatur de ese momento: Cancún, Ixtapa, Huatulco, Los Cabos, y Loreto. Cada desarrollo tiene un color, una simbología y estilo urbano propio.
La obra de Sebastián está basada en disciplinas científicas como las matemáticas y la geometría, con matices de topología y cristalografía, desarrollando un estilo denominado Geometría emocional, siendo su obra más representativa El Caballito de Reforma.
En su oportunidad, Sebastián dijo que “hoy es muy especial porque yo soñé con que esta imagen se replicara siempre y creo que lo hemos logrado”.