En las elecciones de 2018 estarán en posibilidades de votar por primera por el presidente de la república poco más de 10 millones de ciudadanos, toda vez que en 2012 la Lista Nominal estaba integrada por 77.7 millones y en el actual proceso lo estará por alrededor de 87.8 millones.
Por otro lado, tenemos que la Lista Nominal de Electores está compuesta por 52% de mujeres y 48% de hombres, esto es una diferencia poco significativa; sin embargo, el dato importante es que las mujeres registran mayor participación que los hombres.
Un Estudio del INE señala que en el 2012 se observó una participación más activa de las mujeres, con una tasa de 66.08%, superior en 8 puntos porcentuales a la tasa de participación masculina que fue de 57.77% en dicho año.
Asimismo, establece en el Estudio que “esta particular diferencia entre sexos, puede deberse en parte al aumento de la población femenina en el mercado laboral, su mayor inclusión en los cargos de decisión (reforzada por la ley de cuotas para candidaturas) o incluso al incremento de discursos de campaña orientados a los intereses de las mujeres”.
Por otro lado, tenemos es que los jóvenes (hasta los 29 años), representa prácticamente 30% del total de inscritos en la Lista Nominal Electoral, con alrededor de 26 millones. Se trata de un gran bloque de ciudadanos que los partidos ambicionan convencer cada proceso electoral pues muchos de ellos votarán por primera vez por presidente de la república.
Los adultos, de 30 a 59 años forman el bloque más numeroso con casi 55% de los posibles electores, alrededor de 47 millones.
Y el de los “adultos mayores”, de 60 años en adelante, es el más reducido, pues apenas representan 16% con poco más de 14 millones.
De acuerdo con el Estudio Censal de Participación Ciudadana de las Elecciones Federales de 2012, editado por el entonces Instituto Federal Electoral, se observa que los niveles más altos de participación se concentran en la población de 40 a 79 años, en tanto que las personas mayores a 80 años y los de 20 a 39 años son los que tienden a participar en menor proporción.
Los jóvenes que por primera vez están ejerciendo su voto (sector de 18-19 años) representan una excepción entre la población joven, alcanzando altos niveles de participación.
El Estudio refiere que “se podría haber pensado que los jóvenes, en su papel de cambio generacional, así como por su amplia participación en las redes sociales, podríıan haber mostrado un mayor interés en la elección directa de sus gobernantes, sin embargo, su apatía hacia las elecciones sigue la misma ruta que lo observado en anteriores procesos y en concordancia con lo que sucede en otras democracias”.