Libertad Bajo Palabra con Ana Cristina Ruelas

La libertad es la posibilidad de hacer, de estar, sin otro obstáculo que la afectación a terceros.

Ángel Hernández
Todo menos politica
Libertad
Articulo 19

Promotora del derecho a la información en el país Ana Cristina Ruelas, directora para México y Centroamérica de Artículo 19, organización independiente que promueve y defiende la libertad de expresión, se dice convencida de la importancia de que una sociedad participe en la defensa de sus libertades.

Advierte del aumento de restricciones en las sociedades democráticas, del incremento de violencia contra la prensa y del acotamiento de las manifestaciones en el espacio público en detrimento de la pluralidad.

“Desgraciadamente ahora vemos cómo se cierran esos espacios de participación y de deliberación de la sociedad civil. Estamos viendo esa tendencia. En Estados Unidos, por ejemplo, el presidente Donald Trump deslegitima a la prensa cuando es indispensable la prevención de la violencia contra el periodismo para fortalecer la democracia y las libertades. Estamos en una situación preocupante porque vemos cómo cada vez más estos peligros acechan”, afirma.

—¿Por qué es importante la defensa de la libertad de expresión en sociedades como la mexicana?


—Una sociedad informada es una sociedad que participa y un país que busca ser democrático necesita de una sociedad que participe y defienda sus libertades en el espacio público de manera abierta y libre. Por eso es tan importante que todos los ciudadanos puedan expresarse libremente, que reciban información y participen de manera activa sin ningún tipo de represalias o restricción.

—¿Cómo se manifiestan los ataques a la libertad de expresión en países como el nuestro?

—En México estamos en una democracia en la que libertades como los derechos a la información y de reunión se encuentran severamente coartados: si bien se nos permite participar y convivir en el espacio cívico, y contamos con flujos efectivos de información plural y objetiva, también es cierto que esas garantías son violentadas constantemente por parte del Estado. Un ejemplo de ello son las agresiones contra los periodistas en nuestro país: llevamos 46 periodistas asesinados, probablemente en relación con el ejercicio de su trabajo. Y esto habla de una posibilidad real de que los flujos de información sean efectivos, es decir: al final el silencio es muy rentable para el poder y la falta de información a la sociedad genera poca participación.

—¿Y qué situación se vive en Latinoamérica en cuanto a libertad de expresión y de información?

—A la par de México vemos esto en otros países, como Nicaragua, donde ahora hay restricciones al espacio cívico, violencia contra la prensa, ocultamiento de información, así como combate a la pluralidad a costa de lo que sea por parte del Estado, mecanismos que hablan de una amenaza directa hacia los regímenes democráticos.

Tenemos también, dice Ruelas, “los casos de Honduras y de Guatemala, países en los que de manera reciente se realizó un largo proceso de combate a la impunidad y la corrupción. Ahora desgraciadamente vemos cómo se cierran esos espacios de participación y deliberación de la sociedad civil”.

—¿Qué riesgos se corren de que la libertad de expresión o los derechos humanos no se consoliden en las jóvenes democracias de Latinoamérica?

—Una sociedad sin información, desinformada, es una sociedad cooptada, insensible a la represión y al autoritarismo. La posibilidad de hacer un escrutinio público del ejercicio del poder, recibir información plural, objetiva de diferentes fuentes, nos permite tomar mejores decisiones para nuestro bienestar y desarrollo. En esa medida si no la tienes entonces los ciudadanos están sujetos a lo que el Estado les da. Y al final, cuando vas en contra o generas un disenso contrario a la línea oficial del Estado, puedes ser sujeto de represión o de actos de violencia.

Verdades

—¿Por qué debemos ser conscientes de la importancia de la libertad de expresión en el desarrollo de nuestra sociedad?

—El periodismo hoy en México ha hecho investigaciones más profundas que diversas autoridades. Gracias al periodismo se iniciaron investigaciones contra ex gobernadores acusados de corrupción y otros delitos. Y gracias a la labor periodística tuvimos conocimiento de las violaciones de derechos humanos en diversos hechos: si no hubiera sido por esta labor no hubiéramos conocido la verdad. Si lo vemos en referencia al 50 aniversario de Tlatelolco, por ejemplo, nos damos cuenta de esa importancia. Antes, cuando ocurrió la masacre de Tlatelolco, las autoridades nos dieron una versión de los hechos y de los muertos que hubo: si hubiéramos tenido una prensa libre en ese momento probablemente hubiéramos tenido una mayor información de lo que realmente ocurrió.

En este tiempo y con los medios digitales que tenemos, como internet, redes sociales y otros espacios, añade la directora regional de Artículo 19, “es mucho más complicado para el Estado incurrir en esas prácticas porque está sujeto al escrutinio constante del periodismo y de los ciudadanos”.

—¿En estos momentos cuáles ve que sean los principales riesgos que en nuestro país afectan la libertad de expresión?

—En principio la violencia desmesurada contra la prensa que estamos viviendo. Al no existir sanciones o consecuencias contra los perpetradores lo que sucede es que siguen aumentando las agresiones, aun cuando existan instituciones para proteger la libertad de expresión. Al mismo tiempo tenemos grandes retos en materia de transparencia, ya que persisten mecanismos que obstaculizan el libre flujo, como son la reserva y la confiabilidad de información, que continúan como reglas en lugar de ser excepciones para el acceso a la información y esto afecta el periodismo de investigación.

—¿Qué papel desempeña la sociedad civil para impedir regresiones en la conquista de derechos fundamentales para el funcionamiento de una sociedad democrática?

—Nuestro papel es luchar por que se cumpla la ley, exigir estándares internacionales en materia de libertad de expresión y acceso a la información. También es importante para nosotros exigir las condiciones mínimas para prevenir las agresiones a los periodistas, protegerlos y denunciar las agresiones contra la prensa: nuestro papel es hacer ver que la libertad de expresión y la libertad de información son valores indispensables para avanzar hacia una verdadera democracia y una mayor participación de la ciudadanía.

—¿Para usted qué es la libertad?

—La libertad es la posibilidad de hacer, de estar. Lo más importante es que no haya restricciones. Que la libertad no tenga otro obstáculo que la afectación a terceros y no la decisión o la piel delgada de los funcionarios públicos o de los políticos. Que el terreno en el que se ejercen las libertades sea un terreno libre de obstáculos para poder avanzar hacia la meta: hacia un país en el que la gente participe y esté informada.

Ana Cristina Ruelas es abogada y maestra en Administración Pública y Política Pública por el Tecnológico de Monterrey. Ha desempeñado distintas tareas en organizaciones de derechos humanos en México y Perú. Trabajó en la oficina de acceso a la información de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y ha realizado diversos proyectos relacionados con educación para el desarrollo. Fue Oficial del Programa de Acceso a la Información de Artículo 19, una instancia clave en la promoción del derecho a la información en México. Y ha incidido en la discusión de normas creadas por el Estado para la garantía del ejercicio de este derecho.