PRESIDENTE CONSTITUCIONAL 2018-2024

Se acabará con la corrupción y con la impunidad que impidieron el renacimiento de México.

Antonio Caporal
Política
Foto: Especial
FM

Al rendir protesta ante el Congreso de la Unión como presidente constitucional Andrés Manuel López Obrador inició de manera oficial lo que denomina la Cuarta Transformación de México, es decir, un momento en la historia del país que habrá de significarse por una serie de nuevas leyes y un estilo diferente de gobernar, que a su vez tendrán como eje principal buscar el bienestar de la gente.

Y precisamente fue el pueblo el otro gran protagonista de este 1 de diciembre: como no se había visto en el pasado reciente, en esta ocasión el nuevo jefe del Ejecutivo federal estuvo acompañado en sus diversos recorridos por una multitud expectante, esperanzada, festiva e incluso eufórica.

Dentro del Palacio Legislativo el protocolo fue puntual: Enrique Peña Nieto entregó al presidente del Congreso de la Unión, Porfirio Muñoz Ledo, la banda presidencial para que este último invistiera a López Obrador y de esta forma se procediera al rendimiento de protesta.

“Protesto guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes que de ella emanan, y desempeñar leal y patrióticamente el cargo de presidente de la República que el pueblo me ha conferido de manera democrática, mirando en todo por el bien y la prosperidad de la unión. Y si así no lo hiciere que la nación me lo demande”, juramentó.

Acto seguido el ya primer mandatario pronunció un discursos desde la llamada “alta tribuna de la nación”, mensaje que ovacionaron tanto los invitados especiales como senadores y diputados, en especial los de partidos que lo llevaron a la Presidencia (Morena, PT y PES), quienes respaldaron los anuncios de la nueva administración: creación de la Guardia Nacional, becas de empleo y trabajo para los jóvenes, impulso al campo, reactivación del sector energético, apoyos a grupos vulnerables y, lo principal, erradicar la corrupción y la impunidad como principio básico para acabar con la violencia y generar bienestar.

Inicia así un nuevo régimen: el de Morena, el del lopezobradorismo, el del poder depositado en la gente, porque “el pueblo pone y el pueblo quita”.

Punto final

Con humildad y actitud de hombre de Estado López Obrador hizo un reconocimiento a Enrique Peña Nieto durante la etapa de transición y el desarrollo del pasado proceso electoral: “Le agradezco sus atenciones. Pero, sobre todo, le reconozco el hecho de no haber intervenido, como lo hicieron otros presidentes, en las pasadas elecciones presidenciales”.

El presidente refirió que por mandato del pueblo inicia la Cuarta Transformación de México: “Puede parecer pretencioso o exagerado pero hoy no solo inicia un nuevo gobierno: hoy comienza un cambio de régimen político, una transformación pacífica y ordenada, pero al mismo tiempo profunda y radical; porque se acabará con la corrupción y con la impunidad que impidieron el renacimiento de México”.

Explicó que la Cuarta Transformación no se trata de un asunto retórico o propagandístico sino que “se sustenta en la convicción de que la crisis de México se originó no solo por el fracaso del modelo económico neoliberal aplicado en los últimos 36 años sino también por el predominio en este periodo de la más inmunda corrupción pública y privada”.

A su juicio, “nada ha dañado más a México que la deshonestidad de los gobernantes y de la pequeña minoría que ha lucrado con el influyentismo”. Y esa, dijo, “es la causa principal de la desigualdad económica y social; y también de la inseguridad y de la violencia que padecemos”.

Asimismo asoció el problema de la corrupción a la implementación del llamado modelo económico neoliberal: “En el periodo neoliberal la corrupción se convirtió en la principal función del poder político. Por eso si me piden que exprese en una frase el plan del nuevo gobierno respondo: acabar con la corrupción y con la impunidad”.

Indicó que contrario a lo que pudiera suponerse la nueva etapa iniciará “sin perseguir a nadie: porque no apostamos al circo ni a la simulación. Queremos regenerar, de verdad, la vida pública de México”.

En este sentido consideró que “no habría juzgados ni cárceles suficientes y lo más delicado, lo más serio: meteríamos al país en una dinámica de fractura, conflicto y confrontación y ello nos llevaría a consumir tiempo, energía y recursos que necesitamos para emprender la regeneración de la vida pública de México”.

Neoliberalismo

Además de culpar al neoliberalismo de la corrupción, también lo hizo responsable del magro crecimiento económico: “En cuanto a la ineficiencia del modelo económico neoliberal baste decir que ni siquiera en términos cuantitativos ha dado buenos resultados. Recuérdese que luego de la etapa violenta de la Revolución, desde los treinta hasta los setenta, la economía de México creció a una tasa promedio anual de 5% y durante ese mismo periodo, en dos sexenios consecutivos, de 1958 a 1970, la economía del país no solo creció a 6% anual sino que este avance se obtuvo sin inflación y sin incremento de la deuda pública”.

Expresó que “en cuanto a la política económica aplicada durante el periodo neoliberal, de 1983 a la fecha, ha sido la más ineficiente en la historia moderna de México. En este tiempo la economía ha crecido 2% anual, y tanto por ello como por la concentración del ingreso en pocas manos se ha empobrecido a la mayoría de la población hasta llevarla a buscarse la vida en la informalidad, a emigrar masivamente del territorio nacional o a tomar el camino de las conductas antisociales”.

También formuló una crítica a la reforma energética implementada durante la administración que concluyó: “Nos dijeron que vendría a salvarnos, pero solo ha significado la caída en la producción de petróleo y el aumento desmedido en los precios de las gasolinas, el gas y la electricidad. Se afirmó que se iba a conseguir inversión extranjera. El resultado es que apenas llegaron 760 millones de dólares de capital foráneo, lo que únicamente representa 1.9% de la incipiente inversión pública realizada por Petróleos Mexicanos en el mismo periodo, y apenas 0.7% de la inversión prometida”.

También resaltó que en el periodo neoliberal “el poder adquisitivo del salario mínimo se ha deteriorado 60% y el salario de los mexicanos es de los más bajos del planeta. Durante el periodo neoliberal nos convertimos en el segundo país del mundo con mayor migración. Y por lo que hace a la violencia estamos en los primeros lugares del mundo. Además, según la última medición de Transparencia Internacional ocupamos el lugar 135 en corrupción, entre 176 países evaluados”.

Medidas para el desarrollo

Después del diagnóstico el jefe del Ejecutivo enumeró una serie de acciones que emprenderá su administración, así como de leyes que impulsará para concretar su plan de gobierno.

Comenzó por señalar que se “acabará la vergonzosa tradición de fraudes electorales. Las elecciones serán limpias y libres y quien utilice recursos públicos o privados para comprar votos y traficar con la pobreza de la gente o el que utilice el presupuesto para favorecer a candidatos o partidos irá a la cárcel sin derecho a fianza”.

Afirmó que “el combate a la corrupción y la austeridad permitirá liberar suficientes fondos para impulsar el desarrollo de México. Con esta fórmula sencilla de acabar con la corrupción y de llevar a la práctica la austeridad republicana no habrá necesidad de incrementar impuestos en términos reales, ni aumentarán los precios de los combustibles más allá de la inflación”.

Asimismo hizo el compromiso de que cuando se termine la refinería que se construirá en México y se rehabiliten otras seis refinerías “va a bajar el precio de la gasolina y de todos los combustibles”. Comentó además que tampoco se endeudará al país.

Por otro lado aseguró que no se gastará más de lo que ingrese a la hacienda pública. Además, “se respetarán los contratos suscritos por los gobiernos anteriores, pero ya no habrá más corrupción ni influyentismo en negociaciones con empresas particulares. Me comprometo a que las inversiones de accionistas nacionales y extranjeros estarán seguras y se crearán condiciones hasta para obtener buenos rendimientos, porque en México habrá honestidad, Estado de Derecho, reglas claras, crecimiento económico y habrá confianza”. Reiteró que se respetará la autonomía del Banco de México.

Posteriormente refirió que se impulsarán proyectos productivos con inversión pública y privada, nacional y extranjera: “Estos proyectos se crearán como cortinas de desarrollo de sur a norte del país para retener a los mexicanos en sus lugares de origen. Queremos que la migración sea optativa, no obligatoria. Por ello se construirá el Tren Maya, se sembrarán un millón de hectáreas de árboles frutales y maderables en el sur-sudeste. Se rehabilitarán las refinerías existentes y haremos una nueva refinería en Tabasco para dejar de comprar la gasolina en el extranjero”.

En el Istmo de Tehuantepec “se promoverá la creación de una vía férrea para un tren de contenedores de carga y se ampliarán los puertos de Salina Cruz y Coatzacoalcos. En este corredor habrá energía eléctrica y gas a precios bajos, así como subsidios fiscales para la instalación de fábricas y la creación de empleos. Y en tres años estará funcionando el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, con dos pistas adicionales en la Base Aérea de Santa Lucía”.

Asimismo, dijo, “desde el 1 de enero entrará en vigor la zona libre a lo largo de los tres mil 180 kilómetros de frontera con Estados Unidos. Esta franja de 25 kilómetros de ancho se convertirá en la zona libre más grande del mundo. Allí se cobrará lo mismo de impuestos y costarán igual los energéticos que en California, en Arizona, Nuevo México y Texas”.

Agregó que en dicha franja “se reducirá el IVA de 16 a 8%, el Impuesto Sobre la Renta bajará a 20%, la gasolina, el gas y la electricidad costarán menos que en el resto del país y se aumentará al doble el salario mínimo”.

Puntualizó que “esta será la última cortina de desarrollo para retener con trabajo y bienestar a nuestros compatriotas en el territorio nacional”.

Iniciativas

El primer mandatario anunció que el mismo 1 de diciembre presentó al Congreso proyectos de reforma a la Constitución “para establecer el estado de bienestar y garantizar el derecho del pueblo a la salud, la educación y la seguridad social. Es pertinente exponer con toda claridad que vamos a atender y a respetar a todos. Que vamos a gobernar para todos, pero que le vamos a dar preferencia a los vulnerables y a los desposeídos. Por el bien de todos, primero los pobres”.

Asimismo indicó que “se cancelará la mal llamada reforma educativa, se creará el Instituto Nacional para la Atención de los Pueblos Indígenas, se iniciará de inmediato el programa de atención médica y medicamentos gratuitos en las zonas marginadas del país y se volverá universal este programa de atención médica y medicamentos gratuitos, a la mitad del sexenio”.

Afirmó que los aumentos al salario mínimo no volverán a fijarse por debajo de la inflación.

Otras medidas anunciadas fueron: “Dos millones 300 mil jóvenes serán contratados para trabajar como aprendices en talleres, empresas, comercios y diversas labores productivas o sociales, y se les pagará un salario mientras se van capacitando, de tres mil 600 pesos mensuales. Ya no habrá ninis. No se dará la espalda a los jóvenes”.

Se otorgarán “diez millones de becas a estudiantes en todos los niveles de escolaridad, se crearán 100 universidades públicas, se fomentará el deporte y las actividades artísticas, la ciencia y la tecnología”.

La pensión a los adultos mayores “aumentará al doble y tendrá carácter universal, es decir, también recibirán este apoyo los jubilados, pensionados del ISSSTE y del IMSS. Un millón de personas con discapacidad o con capacidades diferentes tendrán una pensión igual que la de los adultos mayores”.

Se atenderá “de inmediato a los damnificados por los sismos, se otorgarán créditos a la palabra a agricultores, ganaderos, pescadores, a dueños de talleres, a los artesanos, a pequeños comerciantes, a empresarios. Se ayudará a productores del campo con subsidios y precios de garantía, y se venderá a precio justo una canasta de alimentos básicos para combatir la desnutrición y el hambre”.

Advirtió que se evitarán afectaciones al medio ambiente: “Aprovecho para reiterar que no se permitirá el fracking ni transgénicos”.

De igual forma refirió que además de acabar con la corrupción, otra medida para lograr los objetivos planteados es el programa de austeridad: fundamentalmente, bajar los sueldos de los altos funcionarios públicos así como cancelarles el servicio médico privado, al que se destinaban cinco mil millones de pesos: “Nadie podrá viajar en aviones o helicópteros privados a expensas del dinero público”.

El presidente de la República “ganará 40% de lo que recibía el presidente saliente”.

También resaltó que no vivirá en Los Pinos y este lugar se integra al bosque de Chapultepec para convertirse en uno de los espacios más grandes e interesantes del mundo para el arte y la cultura.

Guardia Nacional

AMLO comentó que “otro cambio importante será el de la creación de la Guardia Nacional, si lo autoriza el pueblo y el Poder Legislativo, para enfrentar el grave problema de la inseguridad y de la violencia que padecemos. Esto significa replantear el papel de las Fuerzas Armadas ante la inoperancia de las corporaciones policiales”.

Expresó que “es indispensable aceptar que la Policía Federal creada hace 20 años para suplir la labor de las Fuerzas Armadas en el combate a la delincuencia es en la actualidad un agrupamiento de apenas 20 mil efectivos que carecen de disciplina, capacitación y profesionalismo”.

Añadió que, sin generalizar, por la ineficacia de agentes ministeriales y cuerpos policiales estatales y municipales “el ciudadano mexicano en la actualidad está en estado de indefensión”.

Expresó que siempre ha pensado que ante el problema de la inseguridad “ estoy solicitando al Congreso, con carácter urgente, la aprobación de una reforma constitucional” que permita crear la Guardia Nacional para realizar “funciones de seguridad pública con pleno respeto a los derechos humanos”.

Reconoció que “las Fuerzas Armadas están entre las mejores instituciones de México. Se trata de un Ejército revolucionario, surgido del pueblo”. Añadió que el Plan de Paz y Seguridad incluye la creación de 266 coordinaciones territoriales en el país.

Y en materia de política exterior, dijo, “nos apegaremos a los principios constitucionales de no intervención, autodeterminación de los pueblos, solución pacífica de las controversias y cooperación para el desarrollo”.

Mensaje

López Obrador aseguró que está consciente de la gran expectativa que existe entre los mexicanos y el desafío que significa enfrentar los grandes y graves problemas nacionales: “Soy optimista”, señaló, “vamos a enfrentar bien los grandes y graves problemas nacionales porque creo en el pueblo y en su cultura”. Afirmó que la transformación “se está iniciando y ya vamos en el camino de lograr el renacimiento de México”.

También comentó “que nos vamos a convertir en una potencia económica y, sobre todo, en un país modelo que habrá de demostrar al mundo que acabar con la corrupción es posible”.

El primer mandatario expuso: “Son tres cosas las que necesitamos para enfrentar la crisis de México y dos de ellas están aseguradas de antemano. Lo reitero, un pueblo trabajador y suficientes riquezas naturales. Pronto, muy pronto, tendremos lo tercero: un buen gobierno, y en ese compromiso empeño mi honor y mi palabra”.

Por último, expresó, “así como soy juarista y cardenista, también soy maderista y partidario del sufragio efectivo y de la no reelección”; y dejó en claro que “bajo ninguna circunstancia habré de reelegirme, por el contrario, me someteré a la revocación del mandato porque deseo que el pueblo siempre tenga las riendas del poder en sus manos: en dos años y medio habrá una consulta y se les preguntará a los ciudadanos si quieren que el presidente de la República se mantenga en el cargo o que pida licencia: porque el pueblo pone y el pueblo quita”.

Constitución General de la República

Artículo 89 Las facultades y obligaciones del presidente son, entre otras, las siguientes:

I. Promulgar y ejecutar las leyes que expida el Congreso de la Unión.

II. Nombrar y remover a los secretarios de Estado, embajadores, cónsules generales y empleados superiores de Hacienda, así como a los demás empleados de la Unión cuyo nombramiento o remoción no esté determinado de otro modo en la Constitución.

III. Nombrar, con aprobación del Senado, a los embajadores, cónsules generales, empleados superiores de Hacienda y a los integrantes de los órganos colegiados encargados de la regulación en materia de telecomunicaciones, energía y competencia económica.

VI. Preservar la seguridad nacional, en los términos de la ley respectiva, y disponer de la totalidad de la Fuerza Armada permanente, o sea del Ejército, de la Armada y de la Fuerza Aérea para la seguridad interior y defensa exterior de la Federación.

VII. Disponer de la Guardia Nacional para los mismos objetos.

IX. Intervenir en la designación del fiscal general de la República y removerlo, en términos de lo dispuesto en el artículo 102.

X. Dirigir la política exterior y celebrar tratados internacionales, así como terminar, denunciar, suspender, modificar, enmendar, retirar reservas y formular declaraciones interpretativas sobre los mismos, sometiéndolos a la aprobación del Senado.

XI. Convocar al Congreso a sesiones extraordinarias, cuando lo acuerde la Comisión Permanente.

XIV. Conceder, conforme a las leyes, indultos a los reos sentenciados por delitos de competencia de los tribunales federales.

XVII. Optar por un gobierno de coalición con uno o varios de los partidos políticos representados en el Congreso de la Unión.

XVIII. Presentar a consideración del Senado la terna para la designación de ministros de la Suprema Corte de Justicia y someter sus licencias y renuncias a la aprobación del propio Senado.

Voces

Las reacciones a la toma de protesta de Andrés Manuel López Obrador coincidieron en su mayoría en compartir el mensaje de optimismo que el nuevo mandatario constitucional enarbola desde hace varios años y que hoy reafirmó en su primer discurso presidencial.

Bajo el título Así empieza el gobierno de AMLO, el diario estadunidense The New York Times, por ejemplo, consideró que López Obrador “cumple hoy la máxima de que la tercera es la vencida”, mientras The Washington Post destacó que se trata del primer presidente de izquierda desde que México se convirtió en una democracia en 2000.

El presidente de Bolivia, Evo Morales, saludó la llegada de AMLO a la Presidencia “como una luz de esperanza para su pueblo. Es un político comprometido con los más necesitados; representa la ilusión por mejores días para su patria y la región”.

Iván Duque, presidente de Colombia, manifestó su interés en fortalecer la relación política y comercial con México, al tiempo que destacó que nuestro país tiene una democracia pluralista.

En España, el periódico El País consideró que “México abre una nueva era con la presidencia de López Obrador”, en tanto que El Mundo manifestó que nuestra nación “escribe un nuevo capítulo de su historia democrática”.

En Gran Bretaña el diario The Guardian recalcó por su parte que “el presidente López Obrador toma el poder con la promesa de transformar a México”.

Ivanka Trump, hija del presidente norteamericano, deseó a su vez “¡muchas felicitaciones al pueblo mexicano! Es un honor acompañarles en este día tan histórico y especial”, en referencia a que asistió al evento en representación de su padre.

En México el presidente y fundador de Grupo Salinas, Ricardo Salinas Pliego, se manifestó por “tener la confianza de trabajar con este nuevo gobierno. Todos unidos debemos darle a Andrés Manuel López Obrador la oportunidad de demostrar que cumplirá con sus promesas de justicia y honestidad; y exigirle que cumpla su palabra cuando afirma que no nos va a fallar”.

Para la secretaria ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena, el discurso de AMLO abre “grandes esperanzas”.

En cambio el presidente de la Coparmex, Gustavo de Hoyos, reprobó el discurso del presidente por considerar que incluyó “ideología retrógrada” y “expresiones polarizantes”.

La ex candidata presidencial independiente Margarita Zavala fue concisa: “Que tenga suerte el presidente López Obrador. Le deseo sabiduría y templanza”, al tiempo que su esposo, el ex presidente Felipe Calderón, indicó que “por el bien de México (le) deseo el mayor de los éxitos”.

En Francia el diario Le Figaro escribió que “el nuevo presidente mexicano tiene grandes ambiciones, pero primero debe enfrentar el desafío de las caravanas migrantes”.