Gobierno capitalino inicia campaña de desarme en Iztapalapa

Quienes entreguen un arma recibirán a cambio dinero

Redacción
Política
Campaña Sí al desarme, sí a la paz
Foto: Notimex

México, 4 Feb.- Bajo la visión de “abrazos, no balazos”, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, dio inicio a la campaña “Sí al desarme, sí a la paz” en la alcaldía Iztapalapa.

En el acto celebrado en el atrio del Santuario del Santo Sepulcro (Señor de la Cuevita), ubicado en Calzada Ermita Iztapalapa, destacó la importancia de este programa.

Junto con la titular de la Secretaría de Gobierno de la Ciudad de México, Rosa Icela Rodríguez, hizo un llamado a la población de esta demarcación a participar en este evento a cambio de recursos económicos.

En este sentido, quienes tengan un arma podrán acudir a entregarla a cambio de dinero, mientras que los niños podrán entregar juguetes bélicos a cambio de juguetes educativos.


Al respecto, la secretaria de Gobierno reconoció el éxito que tuvo este mismo programa durante el pasado mes de enero en la Basílica de Guadalupe, que dio como resultado la recolección y destrucción de más de 400 armas de fuego.

Detalló que de dichas armas, 318 eran cortas, 64 largas y 18 granadas y se recuperaron 220 mil 667 cartuchos y 100 estopones, con lo que se logró retirar, en 10 días, 29 por ciento de lo asegurado en 2018.

Reveló que desde el fin de semana pasado realizó recorridos por los diferentes pueblos de Iztapalapa, donde la principal preocupación es, precisamente, el incremento de la violencia y las muertes relacionadas por esta causa.

Por lo anterior, la alcaldesa de Iztapalapa, Clara Brugada Molina, anunció que se extenderán todas las acciones necesarias para lograr este desarme en las 13 zonas territoriales de la demarcación.

Esto cobra importancia porque en Iztapalapa, de los nueve homicidios que se registraban por cada 100 mil habitantes en 2015, la cifra aumentó a 15 por cada 100 mil.

La mayoría de estos muertos fueron por arma de fuego, por lo que urge sacar las armas de los hogares, ya que el año pasado, 438 personas fueron heridas por balas, generando problemas catastróficos para las familias, porque muchas quedan con discapacidad.

Finalmente, reconoció, junto con la jefa de Gobierno, la participación de la Iglesia católica, al permitir que en sus atrios se lleven a cabo estas campañas de desarme.