En la columna pasada les adelanté que las cosas en el PRD estaban color de hormiga ya que a varios de los militantes les habían hecho ojitos en otros partidos, como en los casos de Alejandra Barrales, ex candidata a jefa del gobierno capitalino; Juan Zepeda, ex candidato a gobernador del Edomex, y Luis Sánchez, ex vicepresidente del Senado.
Las tribus, especialmente Los Chuchos, se han encargado de desmoronar a ese partido, al que ya no quiere ni el PAN, su aliado en las elecciones presidenciales de 2018.
Gracias al PAN y a su desesperación por hacerle frente a AMLO el PRD no perdió el registro el año pasado y eso lo sabían Los Chuchos; de hecho, Jesús Zambrano no tenía pudor en decir que si no apoyaba a Ricardo Anaya el partido del sol azteca no vería la luz el 2 de julio.
El inicio de su debacle fue en 2012, cuando Los Chuchos le dieron todo a EPN al firmar el Pacto por México. Entonces se los advirtió Marcelo Ebrard. Luego, en 2018, la mayoría perredista se negó a apoyar a AMLO.
Pues bien, les cuento que desde finales del año pasado MC guiñó el ojo a Barrales y a Zepeda, quienes en una de esas toman ya la decisión. ¿Cómo ven?
Mientras tanto, nueve diputados federales renunciaron al partido del sol azteca y según ellos —aunque nadie les cree— serán legisladores sin partido, pero darán sus votos a Morena. Se me hace que en el partido de Yeidckol Polevnsky tampoco los quieren. Si no me creen, pregúntenle a Héctor Serrano.
¿Se reconcilian Osorio y Alito?
Además les cuento que tras ocho meses de no verse ni hablarse un tercero juntó a Alito Moreno con Miguel Ángel Osorio. El objetivo: pedirle al coordinador de los senadores del PRI que se sume al proyecto de Alito, quien tiene levantadísima la mano para ser el próximo presidente nacional del tricolor. La respuesta del ex secretario de Gobernación fue: “Aún no decido si lo haré”.
El gobernador de Campeche iría en fórmula con Carolina Viggiano como secretaria general. Pero no la tienen fácil porque Ivonne Ortega está más que puesta para competir, y con gran fuerza entre los militantes, y Pepe Narro está por levantar la mano.
La que anda moviéndose con todo para ver si alguien la quiere es Hilda Flores, de la mano de Emilio Gamboa.
Esta guerra sin cuartel ya comenzó y pinta para dejar en una pelea de niños de kínder la protagonizada por Madrazo y Beatriz Paredes, ¡y con redes!
De aquí a agosto tendremos mucha tela de dónde cortar con los priistas y veremos quién tiene más fuerza para levantar al PRI, que desde las elecciones presidenciales no pinta en la vida política del país.
Estilo mata carita....
Ojo, en total, en 2017 la ASF que comanda David Colmenares identificó el uso irregular de 90 mil 476.9 millones de pesos, de los cuales faltan por aclarar 80 mil 356.5 millones de pesos. Esto luego de la tercera entrega de las auditorías a la Cuenta Pública 2017. Por cierto, desde que Colmenares está al frente la institución presentó 54 denuncias ante la hoy FGR por desvío de recursos públicos.