EL MITO DE LA MMT

El dinero no se trata de coerción: se trata de confianza.

Guillermo Fárber
Columnas
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Los defensores de la MMT (Teoría Monetaria Moderna) que se ha vuelto muy popular en los círculos demócratas tienen el mejor argumento contra los keynesianos tradicionales, pero es erróneo porque no entienden el dinero, dice Jim Rickards en https://mail.google.com/mail/u/0/#inbox/FMfcgxwBWKWjfcTGLwmVvFvrNVGTBPMV.

En teoría la MMT, añade Rickards, permite un gasto gubernamental mucho mayor sin tener que aumentar los impuestos.

Las personas que entienden la MMT al menos de alguna manera superficial son las personas que impulsan el debate sobre políticas o se postulan para la presidencia. Muchos economistas y administradores del dinero han atacado al MMT. Pero gran parte de su crítica es injustificada. “Soy un oponente de la MMT”, comenta Rickards, “pero por diferentes razones”.

Es fácil ver por qué tantos políticos en el lado demócrata son grandes partidarios de la MMT. Algunos o todos ellos han salido en apoyo de la matrícula universitaria gratuita, condonación de préstamos estudiantiles, Medicare para todos, cuidado infantil gratuito, ingresos básicos universales (UBI) y un Green New Deal. No hace falta decir que va a costar mucho dinero. Se estima que el Green New Deal, solito, costaría alrededor de 97 anglotrillones, casi cinco veces el PIB anual de Estados Unidos.

Los críticos indican: “Todo esto suena bien, pero no podemos permitirnos eso”. Ese es su principal argumento: que no importa cuán deseables sean estos programas en teoría, simplemente no podemos pagarlos. La mayoría de las críticas a la MMT cae en esa dirección. Incluso los keynesianos que generalmente favorecen grandes cantidades de gasto gubernamental para “estimular” la economía se han manifestado en contra de la MMT. Además los keynesianos dicen que la MMT sería altamente inflacionaria.

La verdadera razón

El problema real con la MMT es su definición de dinero. Toda la teoría se basa en arenas movedizas. Este es el punto en que todos fallan, incluidos los críticos habituales. La base del dinero, la definición del dinero, no tiene nada que ver con pagar impuestos. El dinero no se basa en pagar impuestos.

¿En qué se basa el dinero entonces? En última instancia se basa en la confianza, insiste Rickards. Todos debemos confiar en el dinero que usamos o de lo contrario no tendría mucho valor. Cuando sea tu turno de comprar bienes y servicios necesitas saber que alguien más aceptará tu dinero. Es esa confianza en el sistema lo que crea valor. Ese sistema es muy frágil y puede perderse. Y una vez perdido es casi imposible recuperarlo. Por eso las monedas fiduciarias siempre fallan a largo plazo. Cuando se pierde la confianza las personas se deshacen del dinero tan rápido como pueden.

“Los defensores de la MMT no entienden qué es el dinero. El dinero no se trata de coerción: se trata de confianza. Ellos malinterpretan lo que es la inflación, que no es un fenómeno lineal sino un fenómeno no lineal que puede salirse de control antes de que pueda hacer algo al respecto. Yo utilizo Venezuela como ejemplo. El punto es que no entienden el dinero”.