VIENE EL SOCIALISMO

Incluso los gobiernos en quiebra son capaces de pedir dinero prestado en condiciones increíbles.

Guillermo Fárber
Columnas
Foto: Especial
Ilustración

Esta nota de Simón Black es una pertinente llamada de atención. “Lo que voy a decir puede sonar loco, pero es exacto. Una recesión es inminente y los políticos socialistas esperan como buitres. No se trata de una alarma vacía. Es un hecho: las economías y los mercados financieros siempre pasan por ciclos de auge y caída. Hay años buenos y años malos. Han pasado diez años ‘buenos’. Después de que la peor crisis desde la Gran Depresión acabó con billones de dólares de riqueza en todo el mundo, las economías más desarrolladas tocaron fondo en marzo de 2009 y luego volvieron lentamente a recomenzar su avance”.

Incluso si se ignora la historia económica hay señales ubicuas. Casi todas las principales clases de activos del mundo —acciones, bonos, bienes raíces, hipotecas, etcétera— están en niveles que no tienen sentido. La relación precio/ganancias del mercado de valores de Estados Unidos (la cantidad de inversores están dispuestos a pagar por cada dólar de ganancia de una empresa) casi nunca ha sido mayor. Otras relaciones, como ganancias de precio/ingresos, rara vez han sido más altas. El valor de la totalidad del mercado de valores en relación con el tamaño de la economía solo ha sido tan exuberante en la historia justo antes de la burbuja punto-com que estalló en 2000. En cualquier forma que se mire el mercado de valores está sobrevaluado.

Las tasas de interés han estado en sus niveles más bajos en años de historia (bonos: sube su precio si bajan los intereses). A pesar de que aumentaron un poco en los últimos dos o tres años todavía hay billones de dólares en bonos con rendimientos negativos. Incluso los gobiernos en quiebra son capaces de pedir dinero prestado en condiciones increíbles. Argentina, que muchas veces ha caído en moratoria, emitió un bono a un siglo; solamente un año después el gobierno tuvo que solicitar un rescate del FMI.

Todos endeudados

El saldo bancario promedio en EU es de apenas tres mil dólares y 23% de los gringos no tiene casi ningún ahorro, mientras los niveles de deuda (personal, familiar, corporativa, estatal) siguen aumentando en todo el mundo. Esta corrección económica es inevitable. Es solo una cuestión de cuándo: ¿este año, el próximo?

La crisis financiera de 2008 golpeó dos meses antes de la elección gringa. La economía al instante se convirtió en el tema electoral: únicamente eso importaba. Por eso ganaron los demócratas. Es posible que esto suceda otra vez, catapultando a una legión de socialistas a la Casa Blanca y al Congreso. Porque una crisis económica es siempre una oportunidad para que los políticos capitalicen el miedo para pasar leyes que no tendrían ninguna oportunidad en circunstancias normales. Ahora hay un sinnúmero de socialistas que exigen tasas de impuestos de 70% o más, impuestos sobre el patrimonio, etcétera.

La crisis inminente (¿podrá posponerla Trump 19 meses?) será la mayor redistribución de riqueza en la historia moderna.