LA CHAMPIONS Y SU MAGIA

Hay cosas muy destacables de los dos finalistas que pelearán por la Orejona.

Cristopher Rivera
Todo menos politica
Foto: Especial
AP

Tenemos que sentirnos sumamente agradecidos por lo que nos ha entregado la Liga de Campeones de Europa, mejor conocida como la Champions League, certamen donde no me queda duda se practica el mejor futbol del mundo. ¡Así de fácil y sencillo!

La Champions es como una especie de serie de televisión, de esas que están de moda y no te puedes perder porque tienen un buen contenido que te mantiene con las uñas clavadas al sofá y prácticamente no puedes ni parpadear.

Damas y caballeros: fuimos testigos de una fase eliminatoria de Champions League de antología. Llevo viendo esta competencia los últimos 20 años de mi vida y la edición 2018-2019 me dejó con la boca abierta y agradecido con la emoción, pero sobre todo con el buen futbol practicado en la cancha.

Cada uno con sus formas fueron progresando. Algunos lucieron como nunca. Fue el caso del Ajax, que sorprendió al mundo con un equipo plagado de jóvenes descarados que jugaron como nunca al futbol. Tristemente en el partido antesala de la final frente al Tottenham traicionaron en los últimos 45 minutos esa identidad ganadora y se quedaron en el camino. Pero aún así el cuadro holandés maravilló a los aficionados al futbol con esa escuela patentada hace muchos, pero muchos años.

Respecto del Barcelona, si bien decepcionó al planeta entero con la eliminación sufrida a manos del Liverpool, no puedo dejar de resaltar la gran labor de Lionel Messi. Y aquí sí quiero puntualizar que no pretendo defender al argentino: primero, porque no lo necesita y, segundo, porque por talento puro es el mejor de la Tierra. Decir lo contrario porque su equipo quedó eliminado en semifinales es sacar de contexto las cosas o bien comparar peras con manzanas. Messi sigue siendo un genio y, para no variar, le puso un sabor muy especial a la Champions con tremendos goles, como el que significó el número 600 en su carrera.

El Manchester City no pudo cumplir con el pronóstico de la mayoría: ser campeón. Aunque es otro que juega por nota, quedó fuera por el horroroso gol de visitante y, si mi apuran, por un errorcito arbitral en cuartos frente a los Spurs.Y claro, por ahí se pasearon la Juve, el Madrid y Atlético…

Todo ese ajetreo de buen futbol dejó como finalistas al Liverpool y al Tottenham, ambos representativos del futbol de Inglaterra o de la Premier League, que dicho sea de paso es la mejor.

Los finalistas

Hay cosas muy destacables de los dos finalistas que pelearán por la Orejona.

¡Voy a empezar con el Liverpool! Qué clase de equipo es este, con un manejo de pelota y tiempos impresionante, con jugadores que respetan a cabalidad el futbol asociación. Conozco entrenadores acostumbrados a ganar con Lionel Messi en la cancha o con Cristiano Ronaldo y otros cracks. Pero también conozco a Jürgen Klopp, quien aun cuando cuenta con Mohamed Salah no necesitó tenerlo en la cancha para que losReds estén en la pelea por su sexto título de Europa. Es decir, el sentido colectivo de este equipo es bárbaro, sin apostar demasiado a las individualidades.

Me refería a Klopp: Liverpool tiene en la persona de este entrenador a un sabedor del negocio, a un ganador y le doy un dato: con el Liverpool, Jürgen Klopp ha disputado once eliminatorias europeas y las once las ha ganado.

Del otro lado está el Tottenham, equipo al que debemos valorar enormemente su paso a la gran final, principalmente porque ese futbol garrudo e insistente se genera luego de una estrategia rara y poco común en el futbol actual. Esa estrategia se trató de no invertir un solo centavo en refuerzos; en otras palabras, gastar nada y apostar a la continuidad de cuerpo técnico y jugadores.

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