Ciudad de México, a 22 de agosto. La secretaria de Cultura, Alejandra Frausto Guerrero, afirmó que cada peso destinado a este rubro es una inversión, no un gasto; es un área que dará frutos como ninguna otra a la que se destine presupuesto público. Además, aseguró que esta actividad no puede ser ajena a la desigualdad, el deterioro y la violencia, porque el conocimiento es una de las herramientas más profundas de transformación.
En su comparecencia ante la Comisión de Cultura y Cinematografía, la funcionaria federal detalló que este año esa dependencia trabaja con 22 millones de pesos menos respecto del presupuesto del año pasado; esto se ha reflejado en el gasto corriente, y se realizan esfuerzos encomiables para que no se reste ni un peso a los programas sustantivos; es decir, tener menos burocracia y más apoyo a la cultura.
Respecto de la transparencia y la no corrupción, aseguró que la dependencia trabaja con procedimientos claros y limpios en la asignación y ejercicio de recursos públicos. “Somos parte de un gobierno que dice no a la corrupción, como lo ha repetido el presidente Andrés Manuel López Obrador todos los días”.
Detalló que se han incorporado nuevos mecanismos para el otorgamiento de los recursos públicos por medio de convocatorias abiertas, que garantizan el acceso equitativo a los montos estatales, y que la calidad y alcance de los proyectos culturales sea el factor decisivo en el otorgamiento de los apoyos.
Comentó que en atención a las observaciones de la Auditoría Superior de la Federación y evitar discrecionalidad, se estableció por primera vez un monto desde las reglas de operación; es decir, se tiene precisión de que se desarrollarán un total de 274 proyectos culturales en 627 municipios; en uno de cada cuatro municipios en todo el país.
Manifestó que “todo dinero público es dinero sagrado, además de que la vida pública tiene que ser cada vez más pública, incluyente y transparente; por ello, estamos adoptando todas las medidas necesarias para ejercer los recursos de manera justa, abierta, responsable y transparente; no hay lugar a otro tipo de manejos”.
Puntualizó que se han ahorrado mil 792 millones de pesos, que provienen de las áreas administrativas, como la Dirección General de Administración, la Dirección General de Comunicación Social, la Dirección General de Tecnologías, entre otras. Asimismo, se redireccionaron montos a la preservación y mantenimiento del patrimonio de infraestructura cultural propia. “Hacía muchísimos años que no se atendía la infraestructura cultural de la propia secretaría”.
Agregó que con esos ahorros se reforzaron los estímulos a la creación, diversificando los temas de apoyo, y se robusteció la operación y la actividad cultural.
Sobre el tema de reconstrucción del patrimonio cultural material, refirió que una de las lecciones dolorosas que dejaron los sismos de 2017, es que ahora tenemos claro que donde hay mantenimiento en infraestructura cultural las construcciones se deterioran menos y resisten más una catástrofe.
Dijo que la Secretaría de Cultura intensifica sus esfuerzos para reparar el patrimonio cultural dañado en esos sismos. Al momento, precisó, ya se han entregado 926 inmuebles y se aumentan las acciones para acelerar este proceso.
“Este año se beneficiaron proyectos provenientes de dos entidades federativas: la parroquia del Sagrario de la catedral de la Inmaculada Concepción de Córdoba, Veracruz, y la catedral de la Basílica de Zacatecas o el templo de San Francisco de Asís de Güemez, Tamaulipas. Además, se atienden inmuebles de zonas que no necesariamente fueron afectadas por los sismos, pero que requieren mantenimiento”.
Frausto Guerrero apuntó que la cultura es un derecho humano y el nuevo proyecto de nación apunta a una transformación profunda en la manera de gobernar, en donde esta actividad tiene un papel fundamental para el cambio.
Añadió que en la Secretaría de Cultura se tiene especial atención en los excluidos, los invisibles, los pobres. “No dejaremos a nadie atrás, no dejaremos a nadie fuera”.
Afirmó que la política cultural era discriminatoria y no tenía una visión integradora ni incluyente. Hoy estamos conscientes de que las comunidades no sólo son receptoras de cultura, sino también generadoras, por lo que la secretaría tiene el papel de facilitador.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Cultura y Cinematografía, Sergio Mayer Bretón (Morena), mencionó que la comparecencia tiene el objetivo de llevar a cabo un ejercicio democrático de rendición de cuentas, de control y evaluación presupuestal, pero sobre todo, un intercambio de ideas transparente, franco y respetuoso.
Enfatizó que la Cámara de Diputados es un órgano cuya principal riqueza reside en su pluralidad, misma que refleja la que existe en la sociedad mexicana, de ahí la importancia de celebrar este encuentro, donde se busca transitar a una mejor relación institucional de trabajo que permita fortalecer la cultura, las artes y el patrimonio tangible e intangible del país.
Su correligionaria, diputada María Isabel Alfaro Morales, preguntó a la titular de Cultura sobre cuáles fueron los criterios para determinar la elección de los 338 municipios que serían beneficiados con el Programa Cultura Comunitaria.
De la misma fracción parlamentaria, la diputada Inés Parra Juárez señaló que existe un desequilibrio presupuestal en la Secretaría de Cultura. El Fondo de Apoyo a las Comunidades para Restauración de Monumentos y Bienes Artísticos de Propiedad Federal (Foremoba) sólo obtuvo el 0.88 del total del programa S288 y eso es preocupante. Esto se traduce en un desequilibrio. Por lo tanto, pidió se presente un programa cultural bien diseñado.