NECESARIO, UN PRESIDENTE DE LA CNDH PROPUESTO POR LA SOCIEDAD

La comisión tiene una imagen muy sucia y eso hay que cambiarlo.

Antonio Caporal
Nacional
Foto: Especial
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Con toda una trayectoria de servicio a la sociedad, de manera particular a los grupos más vulnerables; un amplio conocimiento de la difícil situación social y política que atraviesa el país, así como un gran ímpetu por defender y promover el respeto de las garantías individuales, Mauricio Clemente Buitrón Monroy aspira a presidir la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).

En entrevista con Vértigo destaca algunos aspectos de la que será su propuesta de trabajo al frente del organismo; asimismo habla de los principales problemas que observa en materia de violación a los derechos humanos, y sobre todo resalta la importancia de que el próximo titular de la comisión sea una persona propuesta por la sociedad a fin de que se garantice una actuación autónoma respecto de los poderes públicos.

Compromiso social

Clemente Buitrón relata que su formación profesional es de ingeniero-arquitecto y buena parte de su actividad se ha centrado en la elaboración de dictámenes estructurales.

“He apoyado a mucha gente que no cuenta con recursos para pagar un dictamen estructural. Cuando veo que no están aptos para cubrir mis ingresos les doy el servicio de manera gratuita. Pienso que así retribuyo a la sociedad lo que me dio: soy egresado del Instituto Politécnico Nacional”, declara.

Además, dice, al ayudar a la gente sigue el ejemplo que le dio su padre, quien siempre fue una persona que apoyó a los que menos tenían; por ejemplo, a diversas comunidades indígenas (otomíes) en el Estado de México.

También comenta que por los cargos que ha desempeñado en la administración pública y por su trabajo como ingeniero-arquitecto ha tenido mucho contacto con la gente: “Conozco muy bien a las personas, sus necesidades, sus problemas, las condiciones inhumanas en las que viven y, claro, los abusos o la indiferencia que padecen por parte de las autoridades”.

Entonces, “como he apoyado a mucha gente y a muchos grupos sociales, pues llegó el momento en que ellos me dijeron: ‘Ingeniero, usted debería postularse para ser presidente de la CNDH’. Y aquí me tienes”.

—¿Qué lo anima a buscar encabezar la comisión nacional?

—Aquí lo importante es ver que el trabajo de la CNDH va más allá de asuntos legales, de temas de leyes. Lo que busco es que la gente tenga de sus autoridades un trato digno y un trato eficiente. Busco evitar que los servidores públicos omitan cumplir con sus responsabilidades o que maltraten o abusen de los ciudadanos; de hecho, de todos los que se encuentran en el país, sean o no mexicanos.

Esta forma de pensar y de actuar, añade, “es la que me ha ganado el respaldo de mucha gente y de organizaciones. Por ejemplo, los integrantes del Consejo Federal Regulatorio de Derechos Humanos, que aglutina a muchas asociaciones civiles, muestran especial interés en apoyar mi candidatura, y eso que no tengo el gusto de conocer a muchos de ellos”.

Diagnóstico

Buitrón asegura que ve un gran problema con la situación de los derechos humanos en el país e igualmente observa deficiencias en la CNDH: “La comisión tiene una imagen muy gris, muy sucia, y eso hay que cambiarlo”.

Agrega: “Tenemos todo un marco jurídico que garantiza los derechos humanos. Nuestra Constitución marca más de 39 derechos humanos, la Declaratoria Universal marca 30 derechos. Tenemos que defender, promover, difundir y siempre garantizar esos derechos a todos los nacionales y extranjeros aquí en el país, y a nuestros connacionales en el extranjero”.

Asimismo destaca que entre sus proyectos, de llegar a la presidencia de la CNDH, está instruir a los estudiantes desde la primaria: “Buscaré un convenio con la SEP para que los planes de estudios prevean la enseñanza de los derechos humanos: todos deben saber cuáles son sus derechos y entender que todos somos iguales ante la ley”.

Además, indica, trabajará para que la comisión nacional consiga que los servidores públicos que incurran en violaciones a los derechos humanos “sean realmente sujetos a la sanción que ameriten”.

Por otro lado señala que se deben fortalecer las recomendaciones que emite la comisión a partir de sus investigaciones. A su juicio actualmente diversas autoridades ignoran las recomendaciones del organismo y en consecuencia urge buscar los mecanismos para fortalecerlas: “Si no aceptan las recomendaciones que el Congreso cite a comparecer a los funcionarios que no las atiendan; y si el Congreso no los cita a comparecer entonces acudamos al auxilio de organismos internacionales. No olvidemos que México tiene firmados convenios con la Corte Interamericana de Derechos Humanos, con la Organización de Naciones Unidas…”

También refiere que una vez al frente de la comisión pondría especial atención en las quejas que se presentan con las instituciones del sector salud: “Vemos que el IMSS yel ISSSTE tienen más de 54% de las quejas que recibe la CNDH; luego están el Instituto Nacional de Migración y los cuerpos de seguridad, donde igual hay que poner mucha atención”.

Clemente Buitrón sostiene que su perfil como ingeniero le permite ir más allá de promover y defender los derechos humanos: “Promoveré toda una reingeniería tanto de la CNDH como de toda la estructura de gobierno cuyo fin sea hacer más efectiva la defensa de los derechos humanos”.

Y añade: “Los ingenieros enfrentamos y resolvemos los problemas: no los ocultamos ni los minimizamos”.

Finalmente celebra que en el proceso de selección se promueva que sea la sociedad la que proponga al titular de la CNDH: “Es importante que el próximo presidente de la comisión sea alguien de la sociedad, no de ningún grupo político ni de ningún partido. La institución ya tiene la autonomía, ahora le hace falta alguien realmente autónomo. Que sea una persona que salga del pueblo, de la sociedad, un ombudsman que honre el significado del vocablo sueco, es decir, un defensor del pueblo. Y como te platicaba, la gente ve en mi persona a alguien que sí los va a defender”.

Clemente Buitrón

Estudió la carrera de ingeniero-arquitecto en el IPN.

Ocupó cargos directivos en diversas empresas del ramo de la construcción.

Desempeñó diferentes encargos en la Secretaría de Gobernación, el Instituto Nacional de Migración y la Secretaría de Seguridad Pública del entonces Distrito Federal.

Es presidente del Consejo Nacional del Ilustre Colegio Nacional de Ingenieros y Arquitectos de México AC.