EL TRISTE

El personaje en cuestión se fue como llegó: entre críticas.

Lourdes Mendoza
Columnas
Foto: Especial
SCJN

Quien seguro anda triste, como dice el título de la canción de José José, es Eduardo Medina Mora, quien renunció a su cargo como ministro de la SCJN entre cuestionamientos por posible triangulación de recursos.

No me digas que te vas, le podríamos decir al ex ministro, al que le faltaban once años en el cargo pero, ¿qué les cuento?, que el personaje en cuestión se fue como llegó: entre críticas. En su elección, el 10 de marzo de 2015, en el PRD —entonces la tercera fuerza política en el Senado— colocaron letreros de protesta en los escaños: “Genocida”, se leyó en el lugar de Dolores Padierna; “Liberó recursos de Raúl Salinas fuera de la ley”, en el de Zoé Robledo; “Nombramiento inconstitucional”, en el de Alejandro Encinas. Hoy aquellos que protestaron son parte de la 4T.

En mayo escribí la columna ¿Quién le mete el pie a la 4Tvs. la corrupción? y adelanté que en el gobierno federal veían como el mayor opositor a la lucha anticorrupción al “infiltrado peñista en la SCJN” (sic), quien en su momento apoyó un criterio para congelar cuentas en la administración anterior; así pudieron fácilmente congelar los activos de gobernadores corruptos y hasta narcos. Pero después el susodicho impulsó una rigidez que haría imposible esta tarea al pretender poner sobre aviso al acusado y, meses más tarde, ejecutar la acción, obvio ya que vació la cuenta. ¡Así como lo está leyendo!

Meses después llegó la renuncia, a pesar de que el 18 de junio pasado Medina Mora mandó una carta a integrantes del Poder Judicial para desglosar 32 transferencias bancarias que hizo en HSBCUSA y HSBCUK entre 2016 y 2018, las cuales, afirmó, no fueron por más de 100 millones de pesos sino por siete millones 487 mil 261 pesos.

La nave del olvido

La nave del olvido es ni más ni menos que el avión presidencial, aunque AMLO dio a conocer que ya hay un interesado en comprarlo luego de que en diciembre de 2018 se anunció la venta y la aeronave se envió a EU, donde mantenerlo estacionado por un año en un hangar de California costará 720 mil dólares.

Y ya que hablamos de aviones les cuento que un juez federal dio marcha atrás a una de las siete suspensiones definitivas que han frenado la construcción del aeropuerto de Santa Lucía, pero ojo: de eso a que haya luz verde para aterrizar falta mucho. ¿Se construirá la obra? Como dicen los títulos de El príncipe de la canción: Lo dudo; Vamos a darnos tiempo.

El presidente de la Coparmex, Gustavo de Hoyos, calificó de “chicanada legal” el que la 4T declarara a Santa Lucía una instalación estratégica, de seguridad nacional, argumento que sirvió para la decisión del juez. El presidente de la Canacintra, Enoch Castellanos, consideró que esta obra está condenada a ser un “elefante blanco” en pocos años.

Estilo mata carita…

Claro que se vio como un pobre tonto, ingenuo charlatán. Insultar a Adriana Dávila por el tema de trata de personas es inaceptable. Mi solidaridad con la diputada, una gran política y mejor ser humano.