UNA MEDALLA EN MANOS DE AMLO

Por primera vez un presidente debe resguardar el máximo galardón que otorga el Senado.

Lourdes Mendoza
Columnas
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Cuartoscuro

La codiciada medalla Belisario Domínguez que ganó la activista Rosario Ibarra de Piedra está en manos de Andrés Manuel López Obrador. Por primera vez un presidente debe resguardar el máximo galardón que otorga el Senado. ¡Vaya paquete!

Rosario le puso un reto a su amigo: “Dejo en tus manos la custodia de tan preciado reconocimiento y te pido que me la devuelvas junto con la verdad sobre el paradero de nuestros queridos y añorados hijos y familiares”.

AMLO la aceptó. Estaba conmovido, al borde de las lágrimas. Quien no pudo contener la emoción fue la presidenta del Senado, Mónica Fernández, pero mientras ella lloraba hubo quienes reían. ¿A quién me refiero? A las priistas Claudia Ruiz Massieu y Verónica Martínez. ¡Quiúbole!

A la Casona de Xicoténcatl acudió el secretario que está en el ojo del huracán por la liberación de Ovidio Guzmán, es decir, Alfonso Durazo, quien afirmó que no renunciará tras el operativo fallido de Culiacán. Pues no, pero seguro ya prepara lo que sin duda será una ruda comparecencia en el Senado el próximo martes.

También acudieron los secres de Sedena y Semar, muy sobrios. Por cierto, a su salida AMLO dijo que hará lo humanamente posible para dar con los desaparecidos, lo que seguro le recordará la medalla Belisario, la séptima que gana una mujer desde 1954.

Pemex, ¿organización criminal?

Lo que les contaré los dejará helados. Hay que tener mucho cuidado en cómo se manejará el tema de la corrupción en Pemex ya que de demostrarse que es una institución donde la corrupción es endémica —léase que no es un tema de personas sino de la empresa— el Departamento de Justicia de EU la puede declarar una institución extranjera criminal. ¡Así como lo están leyendo!

Y esto ¿qué consecuencias traería? Podrían desde suspender las transacciones comerciales hasta la intervención directa, lo cual podría usted pensar que es impensable. Pero esto no es lo peor: lo peor sería: ¡tenedores de bonos! Baste decir que la deuda de Pemex (principalmente externa) es de 106 mil millones de dólares, siendo aún más exacta, 8.7% del PIB. Luego, entonces, imagínense que los tenedores de bonos en los mercados internacionales hagan un caso viable ante la SEC.

Ojo: esto podría suceder ya que el tema de la petrolera en bancarrota, Oro Negro, se está dirimiendo en una corte de Nueva York y sus principales socios, Gonzalo Gil White y José Antonio Cañedo, tienen orden de aprehensión y ficha roja. Por si esto fuera poco súmele el tema de Romero Deschamps, por lo que el gobierno de la 4T deberá ser muy cuidadoso en manejar que los corruptos son las personas, no la institución.

Estilo mata carita…

No es por intrigar pero adivinen qué superdelegado federal no fue convocado a la reunión que tuvieron con AMLO en Palacio Nacional. Pues Armando Zazueta, de Jalisco. ¿Será por la red de nepotismo que le destaparon? A todo esto llama la atención el silencio de Irma Eréndira Sandoval, pues Zazueta tiene quejas hasta por persecución política.