El síndrome de ovario poliquístico (SOP) es una afección endocrina que afecta a entre 6 y 7% de las mujeres en México: va más allá de ser un problema ginecológico, puesto que se trata de una condición que puede afectar varios ámbitos de la salud al favorecer el sobrepeso, provocar severas alteraciones menstruales e incluso ser motivo de infertilidad.
Pero eso no es todo, porque el SOP es responsable de acné, amenorrea o ausencia de menstruación, oscurecimiento de la piel del cuello, axilas o ingles (acantosis nígrica), así como un incremento de la vellosidad en el rostro y cuerpo (hirsutismo).
De igual forma, se relaciona con resistencia a la insulina y en la etapa adulta llega a presentar diabetes mellitus.
“Todas las mujeres son susceptibles de desarrollar el SOP y tienen el riesgo de desarrollar diabetes en la edad adulta, por lo que es necesario que conozcan los datos clínicos de manera preventiva para atenderlo adecuadamente y evitar las repercusiones sistémicas como la infertilidad”, señala Marcelino Hernández Valencia, con subespecialidad en ginecología endocrina y presidente de la Asociación Mexicana de Medicina de la Reproducción (AMMR).
Esta condición se presenta con mayor frecuencia entre los 18 a 36 años, pero en la vida adulta la mujer deberá extremar la vigilancia porque se ha observado que este trastorno es un aviso de que está en riesgo de desarrollar diabetes mellitus desde 60 hasta 75% e infertilidad hasta en 51% si la paciente no tiene el tratamiento adecuado.
“Lo preocupante es que pese a todos los síntomas en la consulta se observa que la mujer se preocupa principalmente porque no ovula y no logra embarazarse, es decir, es diagnosticada hasta el momento que desea ser madre”, indica el especialista.
Hernández Valencia dice que las pacientes refieren una vida normal en sus primeras etapas de vida pero al llegar a la adolescencia y con la menstruación comienzan a observar cambios metabólicos que tienen consecuencias en su aspecto corporal y esto obedece a la resistencia a la insulina, lo que les provoca un estado alterado con crecimiento de quistes en el ovario, interferencia en la actividad de las células y mayor concentración de hormona luteinizante LH.
El especialista detalla que a nivel emocional la mujer con un cuadro clínico establecido de SOP presenta problemas sicológicos por su imagen corporal, ya que aumenta su vello facial —como bigote— y tiene la sensación de rechazo, se deprime porque hace todas las dietas y no logra bajar de peso, en algunos casos sufre rechazo de la pareja o se resiste a tener una relación amorosa.
Nueva opción
Hasta hace algunos años los síntomas del SOP se trataban con anticonceptivos orales para dar una ciclicidad hormonal y estimular al ovario a retomar su funcionalidad con el uso de antiandrógenos, los cuales permitían bloquear los andrógenos circulantes y con esto se lograba revertir factores fenotípicos; sin embargo, también se prescribían medicamentos para la resistencia a la insulina como la metformina; aminoácidos para mejorar la dieta y vigilancia del peso.
“En la actualidad han surgido suplementos que mejoran el estado metabólico de la paciente favoreciendo la funcionalidad de las células del ovario, es decir, tratando el origen del SOP y el estado general de la mujer al corregir la resistencia a la insulina”, destaca Alfonso Moguel, director médico de Exeltis México.
Hay ahora suplementos alimenticios “respaldados con evidencia científica de eficacia y seguridad para el tratamiento del SOP e infertilidad”, con una formulación que incluye ácido fólico, la cual a través de foros académicos ha demostrado éxito terapéutico “en más de 17 mil pacientes en México, quienes han logrado mejorar su sensibilidad a la insulina, disminuyendo la concentración de andrógenos, restaurando los ciclos menstruales y la ovulación, mejorando las tasas de fertilidad significativamente”, asegura Moguel.
Por su parte Raoul Schocher, CEO de Exeltis México, afirma que se fomentan foros académicos con un alto nivel, donde se revisan temas de actualidad en Síndrome de Ovario Poliquístico, diabetes mellitus e infertilidad, así como innovaciones terapéuticas en el abordaje terapéutico de este padecimiento.
Manifestaciones y síntomas de SOP
Ciclos menstruales irregulares, ya sea por amenorrea o hipermenorrea.
Ausencia de ovulación y, como consecuencia de esta, infertilidad.
Tendencia a la obesidad y dificultad para perder peso.
Hirsutismo (presencia inusual de vello).
Manchas oscuras en la piel alrededor de la nuca o el cuello.
Quistes en los ovarios.
Acné.
Exceso de apetito.
Hipertensión, colesterol y triglicéridos elevados.
Diabetes.
Abortos espontáneos.
Problemas de tiroides.
Libido disminuida.
Resequedad en piel.
Alopecia.
Fatiga.
Sensibilidad en senos.
Hinchazón de manos y piernas.
Dolor de cabeza.
Ansiedad.
Síntomas depresivos.