Diputados de Morena pretenden modificar el presupuesto de la Ciudad de México para disponer de 400 millones para la Universidad de la Salud, lo cual debió discutirse cuando se aprobó el presupuesto, por lo que grupos de oposición no están de acuerdo y van a llevarlo a un análisis.
“Esta decisión ha sido la mayor consensuada con el grupo parlamentario, una decisión unánime. Estamos organizando de dónde se obtendrían los recursos, por lo que será a principios de febrero cuando demos a conocer todos los detalles. Este consenso nos unifica, nos devuelve mucho el sentido del trabajo legislativo”, dice la diputada morenista Lilia Rossbach Suárez, de Morena.
Siguen desorientados los diputados de Morena ya que dan a conocer una decisión que dan por descontada cuando no tienen idea cómo la presentarán al pleno para que se apruebe modificar el presupuesto. Dan por hecho que pasará porque tienen mayoría pero descuidan las formas, la atención hacia sus compañeros de la oposición. Y si no, veremos.
“Como es del conocimiento público en días recientes el presidente de la República y la jefa de Gobierno presentaron el nuevo centro educativo Universidad de la Salud para la formación de personas especialistas de la salud, para todo el país, el cual se ubicará en la antigua Escuela de Ingenieros Militares en la Cuarta Sección del Bosque de Chapultepec”, expuso la legisladora.
Es cierto. El anuncio se hizo. Pero no se dijo de dónde saldrían los recursos. Y bueno, hasta ahorita no se sabe porque no tienen idea de las partidas que van a reducir su presupuesto para iniciar este nuevo centro educativo. ¿Y sus asesores, dónde están?
“Nuestro grupo parlamentario siempre ha apoyado las políticas públicas y sociales que beneficien y hagan posible el ejercicio de los derechos de la población. En este caso incrementar recursos para crear esta nueva universidad que ayudará a cumplir el objetivo de brindar educación integral y acceder a la salud, fortaleciendo la formación de personal profesional que atienda a las comunidades que carezcan de atención médica inmediata”, sostiene la diputada Rossbach Suárez.
Nadie duda que es necesario contar con personal especializado para atender a muchas comunidades que carecen del servicio médico indispensable. Aquí lo que no cuadra es la forma. Y la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) podría invalidar algunas leyes que se aprobaron al “ahí se va” y podrían correr la misma suerte que las del sistema anticorrupción. ¿O me equivoco?
“El dinero para la Universidad de la Salud debió discutirse en el presupuesto 2020”, advierte a su vez el diputado perredista Jorge Gaviño Ambriz.
Pues no cabe duda que a los morenos les falta experiencia. Es cuestión de números y conocer los entretelones de los presupuestos. Y sobre todo el del Congreso. No se trata de imposibilitar la transferencia de recursos: se tiene que estudiar, analizar dónde se van a hacer los recortes, y la realidad los rebasa. No saben cómo hacer las cosas bien. ¡Lástima!
El bolso de Laura…
Y ahora le cuento que las grillas están al rojo vivo: los diputados de Morena ya fueron emplazados —afirman los que saben— a resolver el conflicto interno que tienen y evitar la parálisis del Congreso. Esta semana que inicia deben elegir nuevo coordinador para que se integre a la Jucopo y resolver pendientes como es la sentencia de la SCJN respecto del sistema anticorrupción local y la reforma constitucional del artículo 28, propuesta por el presidente… Se dice que los diputados van ahora por reformar el artículo 236 bis del Código Penal capitalino para endurecer las penas al delito de extorsión, sancionar a quienes utilicen o faciliten datos a los delincuentes, así como a quienes utilicen juguetes que simulen armas para cometer un ilícito. Sin duda aprobarán esta iniciativa, porque casi nadie se salva de las extorsiones y los robos y asaltos con armas hechizas. ¡Ojalá…!