Sector privado presenta plan contra crisis por coronavirus

Gobierno de AMLO nos cerró las puertas: CCE

Redacción
Política
Carlos Salazar Lomelín.
Foto: Especial-You Tube

Ciudad de México, México, 7 de abril. El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Salazar Lomelín, convocó a un gran pacto nacional para enfrentar la emergencia económica que viene “sin apoyo del gobierno”.

Ante ello y sumado a la inacción gubernamental para implementar un plan de reactivación económica, el CCE convocó a los empresarios mexicanos y a la sociedad en general, a organizarse un programa civil de ayuda mutua entre particulares para salvar los empleos.

Entre las acciones que propuso Salazar Lomelín, mencionó la factibilidad de programas privados como el de “adoptar una PYME”, así como compras adelantadas a pequeños negocios como estéticas, tintorerías, taquerías, afectadas por la inactividad económica derivada de la crisis sanitaria.

Aseguró que “viene un tsunami” y si no se atiende la emergencia sanitaria con la económica, el Producto Interno Bruto (PIB) podrá caer de 7.0 a 10%, el tipo de cambio llegará a 25 pesos, la deuda en relación con el PIB llegará a más de 50% y se perderán hasta un millón de empleos.

En reunión virtual con tres mil empresarios a nivel nacional, expuso que sus propuestas para enfrentar la emergencia económica “no han sido escuchadas por el presidente de la República; desde hace seis semanas hemos presentado un plan de propuestas para mitigar el impacto a la economía, pero la puerta se ha cerrado”.

Y no solo a la iniciativa privada, dijo, “se ha cerrado la puerta a todos aquellos que han llevado al presidente una propuesta sensata, incluso al partido de Morena, cuya propuesta era similar a la del CCE porque habíamos hablado con los legisladores y estuvieron de acuerdo”.

Argumentó que a los representantes del sector privado “no nos ha faltado ni valentía, ni tiempo, ni interés, ni esfuerzo para tratar de convencer, la puerta se cerró”.

Pero por ello, insistió, ahora “sin la ayuda del gobierno ante la puerta cerrada tenemos que actuar para abrir las puertas del país, para ponernos de acuerdo y hacer acciones que atemperen el impacto enorme que estamos sufriendo por estas crisis”.

Por ello, presentó un programa de apoyos entre particulares; “esperemos que esto haga reaccionar al gobierno, creo que la realidad poco a poco va ir explicándole al gobierno y al presidente de la República de su acción de no hacer nada por este enorme universo de empresas y personas que trabajamos por el país, que necesitamos ser escuchados”.

Advirtió que “si las medidas no funcionan y llegamos a la caída del PIB en 10% y a más de un millón de desempleados, a esas tragedias humanas a las que me he referido, el único responsable es el que cerró la puerta”.

Y ante los reclamos de algunos empresarios que consideran que las exigencias del CCE han sido “tibias”, Salazar Lomelín dijo que se han encontrado con una cerrazón, por lo que hoy “proponemos un gran pacto nacional que aminore el impacto económico por el Covid-19”.

El sector privado busca “de una forma coordinada e inteligente presentar un frente nacional para solucionar los problemas económicos, pero unidos, para ser escuchados ”, e incluso se buscará el apoyo de los sindicatos para que empresas y trabajadores sean más fuertes y puedan así ser escuchados, argumentó.

El líder empresarial dijo que el documento con el decálogo de acciones o ‘Medidas para enfrentar la contingencia económica COVID-19″, que se le presentó al presidente López Obrador hace un mes, “no tuvo respuesta”, lamentó.

“En ningún momento se pidió reducción de impuestos, salvamento de compañías, derogación de responsabilidades fiscales […] Nunca ha pedido el sector privado salvamentos, nunca hemos nosotros pedido, como se dijo todavía el domingo pasado, ‘socializar las pérdidas y privatizar las ganancias’, ese discurso ya no es posible escucharlo”, agregó Salazar Lomelín.

“No hemos sido timoratos pero se nos cerraron todas las puertas porque si no lo hacemos estamos en riesgo de una caída de hasta 10% en el Producto Interno Bruto, que significaría la pérdida de un millón a un millón 400 mil empleos en México […] Esta es la posibilidad de una solución a esa ola que viene en lo económico porque el objetivo es proteger los empleos para que después de 90 días podamos recuperarnos”, afirmó el presidente del CCE.