NUEVO SEMÁFORO EPIDEMIOLÓGICO SIN CIERRE DE ACTIVIDADES

“Hay una nueva realidad demográfica y epidémica en el país”.

Ángel Hernández
Bienestar
El Estado de México regresó a semáforo epidemiológico color amarillo, las autoridades estatales recomendaron a la población evitar  las aglomeraciones, uso de cubrebocas y gel antibacterial, así como la sana distancia.
Crisanta Espinosa/Crisanta Espinosa

Los nuevos parámetros de medición del Semáforo de Riesgo Epidemiológico para establecer el nivel de peligro entre la población acerca del aumento o decremento de la actividad de la pandemia de Covid-19 entraron en vigencia a nivel nacional a partir del lunes 26 de julio sin que se imponga el cierre de actividades económicas esenciales.

Con las modificaciones en la escala de riesgo del coronavirus, consensuadas con las entidades del país, no se establece la suspensión absoluta de las acciones productivas y la convivencia social en los niveles de alto nivel de riesgo de contagio, como son los colores naranja y rojo.

De acuerdo con la Secretaría de Salud (SSA) se realizan cambios al semáforo epidemiológico porque prevalece una pandemia menos virulenta, además de que la sociedad llegó a una fatiga importante después de más de un año de restricciones a las actividades esenciales de productividad y de convivencia.

La vacunación es otro factor para hacer ajustes al semáforo epidemiológico: la SSA destaca que se inoculó hasta el momento a 48% de las personas adultas del país, lo que incide de manera importante en cómo se presentan los contagios de SARS-CoV-2.

El nuevo esquema de medición de riesgo epidémico del Covid-19, que reemplaza al que estuvo vigente durante diez meses, mantiene las pautas de privilegiar la salud de la población y reducir los casos graves de la enfermedad, además de la permanencia de las medidas sanitarias de sana distancia, uso de cubrebocas, lavado de manos y utilización de gel desinfectante.

Nueva realidad

La actualización del Semáforo de Riesgo Epidemiológico entró en vigencia con la publicación del acuerdo de la SSA en el Diario Oficial de la Federación (DOF), en el que se dio a conocer la nueva metodología del semáforo por regiones para evaluar el riesgo epidemiológico que representa el Covid-19.

Destaca que las diversas acciones ejecutadas desde el gobierno federal para hacer frente a la propagación del coronavirus, así como la efectividad de la Política Nacional de Vacunación contra el SARS-CoV-2, “han contribuido a que millones de personas hayan sido inmunizadas y, por ende, no se encuentren dentro de la población en riesgo de agravarse o fallecer por contraer dicha enfermedad, lo que permite a la población retomar diversas actividades en beneficio del país”.

Además del avance de la inoculación, se modificó la distribución por edades de los contagios, las hospitalizaciones y las defunciones relacionadas con el Covid-19, por lo que “ante la nueva realidad demográfica y epidémica en el país es necesaria la actualización de los parámetros de medición del semáforo por regiones para evaluar el riesgo epidemiológico”, añade el acuerdo.

Establece que las personas a quienes se administró un esquema de vacunación contra el virus SARS-CoV-2, habiendo transcurrido dos semanas posteriores a la aplicación de la última dosis, “no se considerarán dentro de la población en situación de vulnerabilidad para contraer dicha enfermedad grave de atención prioritaria”.

Evaluación de indicadores

En los Lineamientos para la estimación de riesgos del semáforo por regiones Covid-19 se establece que el avance de la vacunación a nivel internacional y nacional alteró el perfil demográfico y la dinámica de contagio-hospitalización-defunción de la pandemia, y que se observa un cambio en la dinámica con una nueva distribución porcentual por edades, con incrementos relativos de casos en grupos más jóvenes respecto de personas de la tercera edad.

Resalta el documento que a diferencia de las dos primeras olas epidémicas la relación de crecimiento de las curvas de casos, hospitalizaciones y defunciones se modificó en la tercera ola y la velocidad de crecimiento de las curvas es diferente.

Bajo estas consideraciones, agrega, se evaluó la metodología del Semáforo de Riesgo Epidémico para una nueva calibración de los indicadores, por lo que se hicieron modificaciones en estos y en la nueva estimación del semáforo se reasignaron los rangos de cada nivel de riesgo.

Por ello ahora el puntaje total se distribuye de manera homogénea y de tal forma que la mitad del puntaje abarca los niveles de menor riesgo, bajo y moderado (verde y amarillo), y el otro 50% los niveles de mayor riesgo, alto y extremo (naranja y rojo).

“De esta manera, en conjunto con los cambios en los puntos de corte de los indicadores, se espera que bajo condiciones de actividad viral potencialmente endémica las entidades transiten entre niveles de riesgo bajo y moderado la mayor parte del tiempo” y al pasar “a los niveles de riesgo epidémico alto y máximo se entienda como una verdadera alerta sanitaria”.

Así “transitar al nivel naranja demandará la implementación contundente y expedita de acciones de mitigación para evitar en lo posible la transición al nivel rojo”, explica la SSA.

Puntualiza que dadas las nuevas premisas la mitad del semáforo está en los menores niveles de riesgo y la dinámica de la epidemia se caracteriza por una mayor proporción de casos entre personas jóvenes.

“La apertura y cierre de actividades socioeconómicas será propuesta para que en los niveles más altos del riesgo epidémico disminuyan las actividades que menos estén ligadas a las actividades económicas esenciales de cada entidad y que al mismo tiempo generan gran movilidad y contacto social”, resalta el documento.

Agrega que las autoridades sanitarias de las entidades federativas tienen la obligación de mantener actualizados en tiempo real los sistemas de información definidos para esta estimación de riesgos.

Fatiga social

La Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud explicó que la nueva modalidad del Semáforo de Riesgo Epidemiológico permite recuperar las actividades sociales y económicas del país, así como privilegiar la salud de los mexicanos y reducir los casos graves de Covid-19.

Destacó que las modificaciones en el semáforo epidemiológico “recalibran” la escala de riesgo y que, aun en color rojo, no se impone el cierre absoluto de las actividades económicas y sociales.
“Básicamente la motivación de hacer la modificación al semáforo es la realidad de tener una epidemia menos virulenta y, por otro lado, tener una sociedad que está llegando a una fatiga importante en todos los aspectos, de especial interés en cuanto a la educación pública”, aseveró.

Afirmó que la Estrategia Nacional de Vacunación es un factor determinante para el regreso a ciertas actividades ante la reducción en la probabilidad de casos graves de la enfermedad y la hospitalización.
“La vacunación es el mecanismo de mayor utilidad directa para reducir la severidad de las infecciones. Todas las vacunas contra Covid-19, las seis que están en uso en México, tienen como principal utilidad reducir la gravedad de la enfermedad y muerte”, apuntó.
Recordó que la inmunización contribuye de manera importante a reducir la cantidad de hospitalizaciones y a que la epidemia sea menos severa, pero no significa que haya terminado y por eso hay que mantener las medidas de mitigación como el correcto uso de cubrebocas, el lavado frecuente de manos, la sana distancia y no acudir a sitios concurridos.
Asimismo, llamó a evitar difundir información falsa sobre las vacunas y señaló que de acuerdo con evidencia científica disponible no existe necesidad de que las personas que reciban un esquema de dosis única —como con la vacuna del laboratorio Cansino— requieran un refuerzo o alguna vacuna de otro laboratorio.

Y pidió a los gobiernos estatales reducir aforos en espacios públicos cerrados para que no haya nuevos contagios que, aun cuando son menos intensos, pueden someter a los hospitales a un incremento en la ocupación.

Nuevo semáforo epidemiológico

A partir del lunes 26 de julio entró en vigor el Semáforo de Riesgo Epidémico que se definió con base en el nuevo Lineamiento para la estimación de riesgos del semáforo por regiones Covid-19, por lo que a partir de ese día y hasta el 8 de agosto tres entidades están en color verde, 15 en amarillo, 13 en naranja y una en rojo.

Los estados en verde son Aguascalientes, Chiapas y Coahuila.

En amarillo: Baja California, Campeche, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Michoacán, Morelos, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí, Sonora, Tabasco, Tlaxcala, Yucatán y Zacatecas.

Permanecen en naranja Baja California Sur, Ciudad de México, Colima, Estado de México, Guerrero Hidalgo, Jalisco, Nayarit, Nuevo León, Oaxaca, Quintana Roo, Tamaulipas y Veracruz.

El único estado en color rojo es Sinaloa.