¿Tiempo de esconderse?

Al respecto es ilustrativo este artículo de Dave Hodges, en The common sense man: Cuando este tipo de personas se esconden es hora de estar atentos.

Guillermo Fárber
Columnas
Un colapso global inédito es inevitable y lo más probable es que los primeros detonantes ocurran en la esfera hueconómica, más específicamente, mone
Foto: Tracy O / Creative Commons

Esta visión perfila un catastrofismo que yo comparto, aunque una inminencia que no comparto. Cientos de lecturas, videos y charlas me han convencido de que un colapso global inédito es inevitable y lo más probable es que los primeros detonantes ocurran en la esfera hueconómica, más específicamente, monetaria. De todos modos no es mucho lo que los simples mortales que vivimos al día podemos hacer antes de ese megaestallido, pero al menos podremos entender lo que estará pasando aturdiendo a la mayoría.

Al respecto es ilustrativo este artículo de Dave Hodges, en The common sense man: Cuando este tipo de personas se esconden es hora de estar atentos.


Precaución: muy probablemente estamos ante un artículo extremadamente conspiranoico, exagerado y apocalíptico. No obstante vale la pena leerlo, aunque sea desde un punto de vista de curiosidad sociológica. Puede ser tan absurdo creer ciegamente lo que dice como negarlo cerrilmente como si fuera una simple locura. Reproduzco sus primeros tres párrafos.

El testimonio

“Algo grande está a punto de suceder. ¿Cómo lo sé? Lo sé porque la gente con información privilegiada que conozco desde hace años me ha señalado que el último trimestre de 2014 representa el comienzo del fin de muchas de las instituciones de EU y quizá de nuestra forma de vida. Algunos de mis mejores contactos me han dicho que ha llegado la hora de dejar de advertir a la población sobre lo que se avecina y que es la hora de empezar a buscar un refugio en el cual esconderse. Mi reacción inicial al oír todo esto ha sido no creerles, pero dichas advertencias proceden de fuentes demasiado bien situadas como para no tomarlas en serio.

“En este sentido, hace poco recibí un correo electrónico del pastor Lindsey Williams con respecto de los tiempos difíciles que se aproximan. He invitado a Lindsey Williams a mi programa de radio varias veces, pues es un hombre que dice tener contacto directo con personas de las élites más influyentes de EU. Me respondió que ha dejado de conceder entrevistas. Esta respuesta, por parte de determinadas personas, empieza a convertirse en algo común en estos últimos tiempos.

“Por ejemplo, una de mis mejores fuentes de información privilegiada me dijo que iba a dejar de difundir información secreta, porque lo que tenía que decir ya no tendrá ningún efecto sobre los eventos que se aproximan. Me explicó: ‘El tren tiene su destino final y ya no hay quien lo pare. América tuvo su oportunidad de movilizarse y tratar de detener la tiranía que se nos viene encima, pero los americanos no se levantaron del sofá. Los estadunidenses han estado revolcándose en su propia apatía y en la ignorancia durante décadas. Bien, pues pronto se revolcarán en su propia sangre’. Debéis saber que quien me transmitió este mensaje es un general que ha luchado en dos guerras”.

Si te interesa el tema, querido lector(a), lee completo este artículo, no especialmente alentador pero ilustrativo.