Vacuna de prueba vs el ébola, lista el 1 de noviembre

La OMS califica la enfermedad como la emergencia de salud pública más severa de los últimos tiempos 

Arturo Moncada
Política
El actual brote de ébola ha contagiado a 9,936 personas
Foto: AP

La última actualización de datos de la Organización Mundial de la Salud, realizada el 22 de octubre, indica que el actual brote de ébola ha contagiado a 9,936 personas, la mayoría en Guinea, Sierra Leona y Liberia, cobrando la vida de 4,877 personas, prácticamente todas en África Occidental.

Aunque son necesarios casi 10 años para realizar ensayos clínicos apropiados y comenzar a producir una vacuna, la actual epidemia de ébola ha obligado a adoptar medidas excepcionales y acelerar estos tiempos con el objetivo de desarrollar cuanto antes un fármaco que pueda prevenir el contagio o detener el avance de la enfermedad.

La OMS anunció que ya se cuenta con dos prototipos: cAd3-ZEBOV desarrollado por la farmacéutica GlaxoSmithKline en Estados Unidos, y VSV-EBOV, de la Agencia de Salud Pública de Canadá, la cual ya envió 800 vacunas experimentales a la organización.

El proceso de prueba acelerado de la vacuna en humanos comenzará el 1 de noviembre y el organismo espera poder enviar las primeras vacunas para el ébola a los países afectados, Guinea, Liberia y Sierra Leona, durante los primeros días de 2015.

Las dos vacunas tienen como base virus seguros para humanos y no relacionados con el ébola, aunque contienen un pequeño fragmento de este.

Vacuna

La vacuna estadunidense consiste en un virus del resfriado común de chimpancés, el adenovirus Ad3, que contiene un gen del virus del ébola que produce una molécula llamada glicoproteína GP. Esta vacuna se ha producido en dos modalidades: una lleva la GP de la variedad Zaire de ébola y otra contiene la GP de la variedad Sudán. La combinación de ambas se conoce como la vacuna bivalente, que podría proteger frente a esas dos variantes del virus.

La vacuna canadiense, VSV-EBOV, tiene como base una cepa de virus de la estomatitis vesicular (VSV), que infecta al ganado que contiene el gen de la glicoproteína GP de ébola de la variedad Zaire.

Ambas cepas de virus, por lo tanto, podrían servir para la epidemia actual de la cepa Zaire.

Tanto el adenovirus como el VSV entrarían en las células del organismo y producirían la glicoproteínaGP de ébola, estimulando la respuesta inmunológica. Este tipo de vacunas logran llamar la atención del sistema inmunológico porque, aunque sean seguros, son virus y son detectados como tales por el organismo.

Estos primeros ensayos podrán esclarecer si las respuestas en humanos son similares a las obtenidas en macacos y, por lo tanto, alcanzar la ansiada protección tan necesaria para contener el virus.

Habrá que observar además si las dos vacunas pueden producirse en las cifras prometidas y mantener el acelerado ritmo que han adquirido para llegar a tiempo y frenar la epidemia.

Optimismo

Si bien los casos de ébola siguen fuera de control en tres países de África Occidental, hay destellos de esperanza en otras partes del mundo.

En España, tras 15 días de estar hospitalizada, la enfermera Teresa Romero, quien se contagió por atender a dos misioneros españoles que murieron a causa del ébola, superó la enfermedad.

También fue dado de alta Ashoka Mukpo, un camarógrafo estadunidense reclutado por la cadena de televisión NBC y contagiado en Liberia.

Hay diversos casos de personas que se han recuperado y estas curaciones han generado y devuelto el optimismo de la comunidad internacional para combatir la epidemia.

Por otra parte, el Comisariado de Energía Atómica y Energías Alternativas (CEA) de Francia presentó una prueba de diagnóstico rápido de ébola que se ajusta a la cepa de la actual epidemia y permite determinar en menos de 15 minutos si una persona está infectada.

El aparato, bautizado como Ebola eZYSCREEN, tiene un funcionamiento similar al de las pruebas de embarazo que se venden en las farmacias; se podrá utilizar sin necesidad de otro material específico, a partir de una gota de sangre, de orina o de plasma del posible paciente.

Las pruebas actuales tardan hasta dos horas y media en ofrecer resultados y deben realizarse exclusivamente en laboratorios.

Con esta nueva herramienta se pretende facilitar la cadena logística y la toma de decisiones en el lugar, así como reducir el número de análisis que deben practicarse en un laboratorio específico.