Los técnicos de futbol regularmente son los personajes más serenos dentro de la cancha, pero cuando la pasión se desborda se convierten en los fans más radicales del equipo.
El ejemplo más claro se registró en la final del Torneo Clausura 2013 de la Liga MX, cuando el entrenador Miguel Herrera no pudo contener la emoción y ‘explotó' al estilo ‘Super Sayayin’.
Durante el Mundial de Brasil 2014, el técnico del Tri acaparó las miradas del mundo con su manera de festejar. En esta ocasión, el entrenador demostró el amor por ‘sus muchachos’ y se la pasó repartiendo abrazos cada que su equipo marcaba un gol.
El argentino Antonio Mohamed se dejó llevar por la pasión durante la final del Apertura 2014, cuando demostró que aparte de buen estratega, es un buen bailarín de reggaeton.
En su época como entrenador del Real Madrid, José Mourinho demostró que hasta los técnicos de renombre pueden perder el estilo.
Tras una anotación de Cristiano Ronaldo, el estratega salió corriendo de la banca y se deslizó sobre el césped como si él hubiera marcado el gol.
Mourinho es ‘cliente frecuente’ de los escándalos, durante un partido amistoso en beneficio de la Unicef, el estratega se metió a la cancha y derribó al jugador Olly Murs.
Uno de los festejos más graciosos tuvo lugar en Bulgaria cuando el técnico Botev Plovdiv se puso a ‘correr en círculos’ luego de una anotación de su equipo.