Un restaurante de comida rápida en Oklahoma, Estados Unidos, reprodujo una película pornográfica en sus pantallas.
Un comensal de la sucursal de Kentucky Fried Chicken en esta ciudad grabó y subió un video a YouTube en el que se aprecian imágenes de actos sexuales en las pantallas.
La compañía ya pidió una disculpa pública por “mostrar contenido inapropiado en el restaurante sin nuestro conocimiento y autorización”; y precisó que se trató de un “incidente aislado”.
Con información de Vanguardia.