La tradicional serenidad en la que han vivido los habitantes de la capital del estado bajo el oleaje de una hermosa bahía de aguas turquesas se ve alterada por una ola de violencia que en los últimos ocho meses dejó un saldo de 78 asesinatos —un número importante de ellos cometidos en este puerto—, lo que perturba la legendaria tranquilidad de los paceños.
En este inusual ambiente generalizado de preocupación por la inseguridad, que lo mismo comentan taxistas, estudiantes y vendedores que dirigentes empresariales, arrancaron las campañas para la elección del 7 de junio próximo en las que, como era de esperarse, el tema del combate a la delincuencia ocupa un lugar destacado en las propuestas de los candidatos a la gubernatura.
Junto con el de la inseguridad, tópicos como creación de empleos, atracción de capitales nacionales y extranjeros, desarrollo de un turismo sustentable, minería e impulso a la agricultura para la exportación de hortalizas constituyen los principales temas en que sustentan los candidatos sus estrategias electorales en busca del voto ciudadano.
Estratégicos
A poco más de 3 semanas del inicio de las campañas, el ambiente electoral no ha levantado gran interés entre los habitantes de la ciudad y, salvo grandes espectaculares colocados en vialidades y entronques a las afueras del puerto, la mayor parte de la propaganda exterior se concentra en la parte trasera de camiones de transporte público y algunas paredes dispersas en distintas colonias.
Tanto La Paz como Los Cabos, municipios que concentran 76% de la población del estado, son los principales escenarios de la contienda electoral de los cinco candidatos a la gubernatura, que en estricto orden alfabético son: Ricardo Barroso Agramont, por la alianza del PRI, PVEM y Nueva Alianza; Víctor Manuel Castro Cosío, de Movimiento Regeneración Nacional (Morena); el candidato independiente Benjamín de la Rosa Escalante; Jesús Druk González, del PRD, PT y Movimiento Ciudadano, y Carlos Mendoza Davis, abanderado del PAN y el Partido Renovación Sudcaliforniana (PRS).
El actual proceso electoral se desarrolla bajo nuevas reglas y con la participación de nueve partidos políticos con registro nacional y uno local.
El registro del candidato del Partido Humanista quedó suspendido luego de que la dirigencia nacional, por un lado, y la estatal, por otro, registraron candidatos diferentes, litigio que resolverá el Tribunal Electoral del estado.
Además de la gubernatura estarán en juego cinco alcaldías, 16 diputados de mayoría relativa y cinco de representación proporcional.
Las preferencias en la disputa del Ejecutivo estatal se concentran entre Barroso Agramont, senador con licencia, y Mendoza Davis, ex secretario de gobierno en la actual administración y quien busca retener Baja California Sur para la causa panista.
Para los analistas consultados aquí, en una entidad con una gran extensión territorial y con la población más pequeña del país (637 mil habitantes), las lealtades, los vínculos familiares y la trayectoria política tienen un gran peso entre los sudcalifornianos al momento de votar.
En este aspecto coinciden Ricardo Barroso y Carlos Mendoza, los principales contendientes, ya que su abuelo y padre, respectivamente, fueron gobernadores en la corta historia de la entidad.
Gobierno cercano
Con 35 años, Ricardo Barroso Agramont busca por segunda vez consecutiva ser gobernador de la entidad: se ubicó en segundo lugar en 2011, año en que el tricolor tuvo un repunte electoral en la entidad.
El abanderado del PRI-PVEM-Nueva Alianza compite también por segunda ocasión contra Carlos Mendoza Davis, a quien derrotó en la elección para senador por el estado.
En entrevista, Barroso afirma que de ganar los comicios realizará una gestión de gobierno cercana a la gente y de mucha comunicación, pues asegura que la población del estado se siente desatendida. “Tenemos que atender de fondo los problemas de seguridad, propiciar la reactivación económica para que haya más empleos de mayor calidad, lo que permitirá el incremento de la base tributaria que ayude al gobierno a salir adelante con sus compromisos”, apunta.
Resalta que profundizará las acciones en el tema de educación, para lo cual enarbolará la bandera blanca de la alfabetización y apoyará el crecimiento de las instituciones de nivel superior.
En materia de salud, asegura que impulsará la cobertura total y mejorará la calidad de sus servicios.
Barroso Agramont expone que para generar empleos y atraer mayor inversión en Baja California Sur se debe fortalecer y mejorar la oferta turística, alentar el crecimiento de la industria acuícola por toda la entidad, fortalecer la agricultura y la ganadería con una correcta planeación para crear y mejorar las cadenas productivas locales.
Respecto de la seguridad, reconoce que es un tema preponderante ya que más de 80 ejecutados en poco más de siete meses dan una prueba de la profundidad del problema. “La ciudadanía ya no aguanta más. Proponemos actuar de inmediato en temas como el blindaje en puertos de entradas marítimas, aéreos y terrestres, la instauración del mando único policial, capacitación y equipamiento, entre las acciones más importantes”.
Recobrar la confianza
El profesor Víctor Manuel Castro Cosío, ex presidente municipal de La Paz y ex diputado federal, es el abanderado a la gubernatura por Morena, partido que contenderá por primera vez en un proceso electoral en la entidad.
Asegura que buscan romper el binomio PRI-PAN desde abajo, es decir, con el contacto directo con la gente y el trabajo en las comunidades.
Propone una profunda reforma administrativa sin endeudamiento, lo que ya logró como alcalde de la capital del estado; se propone encabezar un gobierno sin privilegios, austero, donde los salarios del gobernador y de los funcionarios no solo sean públicos sino además evaluados por un consejo ciudadano, cuya creación propondrá. “Todos los privilegios en la administración pública se tienen que acabar. Es importante el ahorro, es la posibilidad de recuperar la confianza de los ciudadanos en que no hay gobernantes con altos sueldos, con privilegios, con un pueblo en condiciones de pobreza cada vez más preocupantes”, asevera.
Castro ve la necesidad de un trabajo conjunto entre los sectores público, social y privado para unir esfuerzos que lleven al crecimiento de la economía local y con ello evitar el aumento del desempleo en Baja California Sur. “Si no generamos empleo, si no generamos crecimiento económico, vamos a seguir teniendo los niveles de violencia a los que se han llegado”, advierte.
Destaca que una de las pesadillas más terribles que han tenido los sudcalifornianos, en especial quienes viven en la capital, es que en un año la violencia y los asesinatos terminaron con una historia, una tradición, una cultura de paz y de tranquilidad en la capital del estado.
De ahí que plantee un plan de reactivación económica emergente, ya que si no se reactiva la economía, si no se crean empleos, “corremos el grave riesgo de que la violencia siga ensombreciendo la vida de una sociedad tradicionalmente tranquila”.
Generar conciencia
En la elección para Ejecutivo estatal logró su registro como candidato independiente Benjamín de la Rosa Escalante, funcionario en la administración del ex gobernador del PRD, Narciso Agundes Montaño, donde realizó un trabajo importante en materia social, experiencia que le ayudó para reunir las casi 19 mil firmas de ciudadanos que necesitaba para cumplir uno de los requisitos más importantes como aspirante independiente a la gubernatura.
Más allá de las enormes dificultades que tuvo para lograr el registro, competir en desventaja clara frente a los candidatos partidistas y con un presupuesto de 34 mil pesos (cifra que puede aumentar por ley a 68 mil pesos en aportaciones de sus simpatizantes) para una campaña de 60 días, De la Rosa Escalante se muestra confiado en que tendrá aceptación, pues dice que hay una percepción positiva de los ciudadanos hacia los candidatos independientes. “Tenemos que responder a una evolución socio-política donde los partidos empiezan a perder el reconocimiento social, mientras que los candidatos independientes tenemos que incrustarnos en ese espectro para abanderar las causas ciudadanas”.
Asegura que durante la campaña no solo buscará el voto de los ciudadanos sino generar conciencia, que la gente reflexione su voto y se convenza de que es tiempo de evolucionar.
Considera también necesario buscar mejores mecanismos de elección y crear conciencia entre los partidos y el próximo gobernador de que si quieren generar confianza en la sociedad deben abrir y flexibilizar la participación de los ciudadanos y de los candidatos independientes en los procesos electorales.
Sus principales propuestas se dan en los temas de inseguridad y crisis económica, que en su opinión son los que más afectan y duelen a la población y los más urgentes de atender.
De regreso
El candidato del Movimiento Progresista Baja California Sur, integrado por PRD-PT-Movimiento Ciudadano, Jesús Druk González, afirma que la coalición lograda es para decirle a los sudcalifornianos que la izquierdas están buscando regresar al gobierno para auxiliarle en sus demanda no satisfechas.
Expone en entrevista que en la entidad se ha deteriorado la seguridad, hay una disminución en el empleo y la gente pugna por salarios dignos.
Destaca el persistente problema de los centros de salud y de las unidades hospitalarias, las deficiencias en la educación media superior sobre todo en municipios en expansión como Los Cabos, además de la falta de incentivos de productividad en las distintas regiones del estado.
Después de doce años de gobiernos del PRD, partido que perdió las elecciones a gobernador en 2011, Druk González reconoce que hoy se necesita un discurso diferente del partido hacia los ciudadanos. “Los gobiernos perredistas atendieron a la gente en sus exigencias mayores, como fueron un mayor equilibrio en el desarrollo del estado, atender la regionalización e incorporar al norte a la dinámica de desarrollo, pues estaba abandonado, impulso del sur, construcción de carreteras de cuatro carriles e impulso a la construcción de infraestructura hospitalaria, entre las demandas más importantes”, recuerda.
Druk González dice que han quedado, sin embargo, pendientes diversas obras y acciones, por lo que abanderarán la demanda ciudadana de que haya un gobierno cercano a la población, con puertas abiertas, audiencias públicas y atención a las necesidades, sobre todo de tipo social.
Resalta que encabezará una administración austera, cuidará que el uso de recursos públicos sea destinado para obras, no habrá privilegios a la clase política y dará un combate frontal a la corrupción.
Impulso a la economía
El abanderado del PAN y el PRS, Carlos Mendoza Davis, propone a su vez más empleos y salarios con una política económica estatal, así como impulsar una política de crédito a la vivienda para que todos los sudcalifornianos tengan su casa.
Se compromete a establecer infraestructura para que los habitantes de la entidad reciban agua potable, además de apoyar con becas de transporte y alojamiento para los estudiantes.
En el tema de mejores oportunidades, planea la construcción de más y mejores hospitales, vialidades y carreteras a través del plan estatal de infraestructura.
Asegura que fortalecerá la economía con el apoyo a la comercialización y distribución de los productos sudcalifornianos; también apoyará a la pesca, la ganadería y el campo.
Impulsará la producción de energías verdes y creará la ruta de pueblos de encanto sudcaliforniano.
En el tema de familia segura, dice, no habrá tolerancia al delito, la entidad contará con una policía 100% confiable y un centro estatal de Política Criminal.
Se compromete a disminuir radicalmente los delitos de homicidio y robo, así como a prevenir adicciones.
Se manifiesta por un mayor impulso de las actividades económicas en los cinco municipios, por lo que de ganar las elecciones continuará con la promoción de obras de carácter social.
Mendoza resalta que es necesario reorganizar, invertir y tecnificar la pesca para beneficio de las comunidades que se dedican a esa actividad. “Vamos a promover que haya más empleos y mejores salarios; ofrezco trabajar para que tengamos mejores oportunidades, así como beneficios sociales para Baja California Sur”, recalca.