La ley es lo que, en teoría, nos hace iguales a todos los ciudadanos de un país, sin tomar en cuenta factor alguno que sea ajeno a la justicia.
En ocasiones, sin embargo, los encargados de hacer cumplir las leyes imponen penas que suenan por demás descabelladas.
Conoce los casos en los que el castigo de la ley para los delincuentes resultó curioso o, incluso, exagerado.
Pasear un burro por las calles
Los jóvenes Jessica Lange y Brian Patrick destruyeron al Niño Jesús de un nacimiento en una iglesia local de Ohio, en 2002. Cuando confesaron su crimen, un juez los sentenció no sólo a 45 días en la cárcel, sino también a pasear un burro por las calles de su ciudad con un letrero con la frase Disculpen la estúpida ofensa.
Casarse con el novio que la golpeaba
Un conservador juez dictó una particular sentencia a Scott Hancock, culpable de golpear a su novia Yvonne Sevier, en 1995. El juez Albert Mestemaker ordenó a Hancock casarse con Sevier en un plazo de 9 meses bajo el argumento de que ambos debían “santificar su relación con un matrimonio”. Tras críticas, Mestemaker negó haber llegado a esta determinación.
Arrestar a todos los asistentes de un juicio
En 2005, el juez neoyorkino Robert Restaino realizaba un juicio de violencia doméstica cuando un celular comenzó a timbrar. El ministro pidió que lo apagaran, pero el ruido continuó. Desesperado, Restaino amenazó a todos los asistentes con ordenar arrestarlos si nadie atendía la llamada, pero nadie hizo caso y el teléfono siguió timbrando. El juez cumplió su palabra y 46 personas fueron a la cárcel esa tarde, aunque la decisión le valió después su destitución.
Recolectar algodón por infracciones de tránsito
Uzbekistán es el sexto productor y segundo exportador de algodón en todo el mundo. No obstante, su industria es blanco de críticas debido a prácticas laborales cuestionables, incluido el empleo de menores. Para solventar este problema, los infractores viales no pagan multas para enmendar sus faltas; en su lugar, son enviados a los campos para ayudar a recoger a cosecha por el periodo que dicte el juez.
15 años en prisión por tener sexo en la playa
Elissa Álvarez, de 20 años, y José Caballero, de 40, enfrentan una sentencia de 15 años en prisión por tener relaciones sexuales en una playa de Florida. Aunque ambos niegan este hecho, ocurrido el 20 de julio de 2014, se espera que ambos tengan que cumplir la pena pese a las críticas por su severidad.
