Adriana sueña con salvar su vida y una fundación contra el cáncer

Un tumor en el mediastino cambió la vida de la estudiante de la UNAM

Juan Carlos Ponce
Política
Adriana
Foto: Juan Carlos Ponce

Crear una fundación que ayude a los jóvenes que padecen linfoma de Hodgkin y poder salvar su vida, es la ilusión de Adriana Carrillo Salas, quien a sus 23 años se debate entre la vida y la muerte a causa de esta enfermedad.

Un tumor en el mediastino cambió la vida de la estudiante de la carrera de Derecho en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quien desde que supo que tenía esta enfermedad lucha por conseguir el dinero para sus medicamentos.

Y es que para tratar esta enfermedad, la joven necesita reunir $432, 000 pesos, cifra con la que busca comprar seis inyecciones de Adcetris, medicamento que puede ayudarle a vencer el cáncer en su totalidad o alargar sus años de vida.

“Este medicamento está diseñado exclusivamente para esta enfermedad. Es caro porque es un medicamento europeo, es un nuevo tipo de quimioterapia que no es tan agresiva, a que me refiero, va directamente a las células cancerigenas”, dice.

La escuela, su pasión

Carrillo Salas es una joven a la que le encanta caminar y disfrutar de la naturaleza, es amante de la música romántica, pero su máxima pasión es asistir a sus clases en la Facultad de Derecho en Ciudad Universitaria.

Tras ser diagnosticada con cáncer en 2012, la joven decidió que sólo había dos caminos: seguir con su vida normal hasta donde la enfermedad se lo permita o quedarse llorando en su cama.

“Ninguno de mis maestros de aquí sabía que yo tenía cáncer, vine con el cuello abierto por la biopsia y decía que me había caído en un baño. No quería que lo supieran, no por pena sino porque yo no quería un trato diferente”, comentó.

A pesar de recibir más de 30 quimioterapias, Carrillo Salas nunca pensó en abandonar la universidad, así que con ayuda de su mamá y su hermana, la joven continuó acudiendo a la facultad para presentar sus exámenes.

“Yo amo este lugar. Durante las quimioterapias imaginaba que estaba en un salón tomando clases y decía ya va a pasar el dolor, ya va a pasar el medicamento y en dos o tres días ya voy a estar en la escuela. Y ese era mi objetivo, aguantarme la quimioterapia y regresar a la escuela”, recordó.
02fer.jpg


Llena de ilusiones

La joven universitaria dijo que el año pasado vivió uno de los momentos más difíciles cuando descubrió que ninguna asociación la ayudaría con su tratamiento.

“Yo recuerdo que toqué muchas puerta y me decían ‘no hay ayuda para ti, porque ya eres mayor de 18 años y porque no tienes cáncer de mama y porque no tienes cáncer de estómago’, porque para el cáncer que yo tengo no hay una fundación”.

Esa mala experiencia provocó que Carrillo Salas se fijara una nueva meta: crear una fundación para ayudar a otros jóvenes con el mismo problema.

“Yo quiero que los jóvenes que estén en la misma situación no sientan el dolor de decir '¿quién me va a ayudar?’. Quiero que ese medicamento entre al sector público, que todos tengamos la oportunidad de curarnos. Si bien es cierto el cáncer nos llega a matar, que no sea el dinero la causa de nuestra muerte”, explicó.

Nunca baja los brazos

Gracias a la ayuda de su familia, amigos y de los alumnos de la UNAM, Carrillo Salas pudo recibir las primeras 2 dosis de Adcetris, con un precio de $72,000 cada una.

“He recibido apoyo de mis maestros, hemos hecho colectas, hemos entrado con votes a los salones a pedirles dinero a los alumnos. Afortunadamente y gracias a la facultad conseguimos 2 dosis”, comentó.

La joven está consciente de que no todo el tiempo va a estar recibiendo apoyo económico. Por tal motivo, junto a su familia sale a recoger botellas de pet para venderlas, tiene un puesto de ropa que le regalan y también realiza diferentes eventos de comida.

“Yo quisiera despertar todos los días poder abrazar a mi mamá, a mi hermana, venir a la escuela, titularle, tener mi vida como la tenía planeada y no puedo. No puedo porque mis días están condicionada a unas ampolletas que si no me las pongo me puedo morir”, comentó.

A pesar de tener una grave enfermedad, Carrillo Salas es una mujer con una chispa especial y con un enorme espíritu de batalla que le impide bajar los brazos.

“He conocido gente de mi edad en el hospital que ya no está viva. Personas, chavas con las que me reí durante la hospitalización, mientras comíamos. Después las buscas y te dicen ‘falleció el mes pasado, falleció hace una semana’. Cuando va a ser el día que alguien le hable a mi mamá y ella diga ‘Adriana falleció, ya no aguantó, no pudo más’ y no es que no aguantara, no es que no pudiera, es que no tengo el recurso, es que no tengo el dinero. Si yo me voy, me voy a ir porque no tengo el dinero para curarme”, agrega.


Todos pueden ayudar

El próximo domingo 14 de junio, la gente que quiere y apoya a la joven universitaria realizará una Venta de Comida Mexicana, en el Centro Social ‘El Tanque’, ubicado Rosa Bengala esquina con Rosa Vulcanó, en la colonia Molinos de Rosas muy cerca del Metro Mixcoac.

En este evento, que tiene como finalidad generar recursos para una de las ampolletas que necesita Carrillo Salas, habrá diversos platillos gastronómicos, música en vivo, juegos para niños y otras actividades.

“El 19 de junio necesito otras 2 ampolletas. Tengo el dinero para una, que es el dinero que los maestros de la facultad reunieron junto a los alumnos, pero me falta una y esa es la que se pretende lograr con la feria de alimentos”.
01fer.jpg

Gracias a recibir las primeras dos dosis, que fueron donadas, Carrillo Salas logró “volver a caminar, volver a dormir bien, despertar y bajar corriendo la escalera”.

“Yo no sé si el medicamento me quite el cáncer pero me dio un día más de vida y de calidad de vida, sobretodo. Ese medicamento que me donaron sirvió para que yo hoy pueda estar hablando contigo, para que al rato yo pueda comer con mi familia. Si me preguntas que si me está curado, no lo sé, pero ahorita ya me quitó gran un dolor”, agregó.

Si quieres ayudar a Adriana, puedes comunicarte con ella a través de la página de Facebook Salva una vida o al correo adrycarrillo@gmail.com.

A continuación te dejo el número de la cuenta donde puedes realizar una aportación, que aunque sea mínima, seguro será de gran valor.

04fer.jpg