La Unión Europea (UE) deploró el aumento del número de ejecuciones en los países que aplican la pena de muerte en el mundo y reiteró su defensa a la abolición de ese tipo de punición.
En un comunicado con motivo del Día Internacional contra la Pena de Muerte, los líderes europeos se dijeron particularmente alarmados con la ejecución de menores y por motivos relacionados al tráfico de drogas.
Señalaron que ambos casos infringen la legislación internacional.
Por otra parte, la UE celebró la tendencia global hacia la abolición de la pena capital, actualmente en vigor en más de dos tercios de todos los países del mundo.
En el continente europeo, Bielorrusia es el único país que sigue aplicando ese tipo de castigo.
La UE volvió hoy a urgir al gobierno de Minsk a conmutar todas las sentencias de muerte en vigor y a establecer una moratoria a la pena de muerte con el fin de acercarse a los estándares paneuropeos.
“La pena de muerte es incompatible con la dignidad humana. Es un tratamiento inhumano y degradante, no tiene ningún efecto disuasivo comprobado, y permite que errores judiciales sean irreversibles y fatales”, afirmó el Consejo de la UE.