Elecciones con bozal

Las encuestas sugieren que el Estado de México, la entidad más poblada del país, tendrá una elección muy cerrada

Sergio Sarmiento
Columnas
Elecciones estado de México
Foto: NTX

Arranca la carrera por el Estado de México, pero con un bozal. Los partidos ya tienen candidatos y propuestas. Los candidatos, de hecho, están dando ya entrevistas a los medios de comunicación. Pero resulta que pueden hablar de todo menos de sus propuestas de gobierno. ¡Qué desperdicio!

La censura es una de las partes más dañinas del actual sistema electoral de nuestro país. En aras de una equidad inalcanzable, se ha creado un sistema electoral costosísimo e injusto que tiene como una de sus principales características las restricciones a la libertad de expresión y a la contratación de espacios en los medios de comunicación. Por lo pronto, el bozal a los candidatos y a los partidos se mantiene hasta el 3 de abril, cuando comienza formalmente la campaña.

Las encuestas sugieren que el Estado de México, la entidad más poblada del país, tendrá una elección muy cerrada. Alfredo del Mazo, candidato del PRI y el PVEM, se encuentra en primer lugar, pero seguido muy de cerca por Delfina Gómez, de Morena, y Josefina Vázquez Mota, del PAN. En un lejano cuarto lugar se encuentra Juan Zepeda, de un PRD que parece desmoronarse.

El Estado de México está hoy —y lo ha estado desde hace años— muy dividido en lo político. El PRI tiene ciertas áreas de influencia, especialmente en zonas rurales y alrededor de Toluca, y por supuesto en ese Atlacomulco que se ha convertido en símbolo del PRI mexiquense, pero también tiene fuerza en Ecatepec, el municipio más poblado del país y tierra del gobernador Eruviel Ávila.

El PAN tiene su enclave en la zona poniente del área metropolitana de la Ciudad de México, una zona de clase media y media alta en la que vive la propia candidata Vázquez Mota.

Tradicionalmente el PRD ha tenido su fuerza en los municipios del norte y el oriente del estado, pero ahora está siendo desplazado de esos mismos lugares por Morena, el partido de Andrés Manuel López Obrador.

Costosa

Muchas veces se ha dicho que las elecciones del Estado de México son una especie de ensayo general para las elecciones presidenciales que tienen lugar un año después. El tamaño de la población de la entidad y su diversidad geográfica y política han sido la razón de que así se le vea. Pero la verdad es que los resultados en el Edomex no necesariamente coinciden con los nacionales: el PRI nunca ha perdido una elección en el Estado de México, pero ha perdido dos elecciones presidenciales frente al PAN.

La elección del próximo 4 de junio es importante en sí misma, pero no porque prefigure un posible resultado en los comicios presidenciales de 2018. Para el presidente Enrique Peña Nieto la elección es significativa porque esta es su entidad y la que ha sido su principal base política desde un principio. Eruviel Ávila, el actual gobernador, tiene también un enorme interés porque sus aspiraciones políticas posteriores dependen en buena medida del resultado de las elecciones.

La elección será muy costosa. La factura final para el contribuyente ascenderá a dos mil millones de pesos. Es un precio muy elevado para una campaña que durará solo 59 días, en la que los candidatos tienen puesto un bozal hasta el momento y que además solamente llevará a la elección de un gobernador. El año que viene, 2018, se llevarán a cabo las elecciones para presidentes municipales y legisladores estatales. Los contribuyentes tendrán que pagar nuevamente.