Fiebre mundialista eleva la temperatura de la fría Moscú

Se ha instalado un reloj en el corazón de la Plaza Roja

Agencias
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Foto: NTX

A 40 días de que el balón ruede en el Estadio Olímpico Luzhnikí, para inaugurar la Copa Mundial Rusia 2018, en la fría ciudad de Moscú ya se empieza a sentir el ambiente festivo que genera esta justa deportiva.

En esta ciudad convergen la Rusia tradicional y la Rusia moderna, ansiosas de mostrarle al mundo todo el progreso social, cultural y tecnológico que ha generado desde la desaparición de la URSS, pero manteniéndose fiel a su espíritu militar y de lucha constante arraigado durante décadas entre sus habitantes.

La gélida urbe moscovita es la sede donde dará inicio la copa mundial de futbol, para lo cual está instalado un reloj en el corazón de la Plaza Roja, que lleva el conteo regresivo para el pitazo inicial y comience así la fiesta más grande del balompié.

Así, con un total de 12 partidos, incluidos la inauguración y la final, Moscú se convertirá en la capital del futbol durante poco más de un mes que durará la competencia.

Aunque por el momento se respira un ambiente conservador a poco más de un mes del inicio del Mundial, desde el Palacio del Kremlin, pasando por la Catedral de San Basilio, los monumentos a Lenin y los históricos museos de la capital rusa.

Por los alrededores de la ciudad aún no se respira el fervor mundialista del todo, pero basta con entrar a una tienda de suvenires para encontrar todo tipo de productos alusivos a la Copa del Mundo.