COMPETENCIA MILITAR CHIMALTLALLI 2019

La obtención del primer lugar para México es consecuencia directa de un importante esfuerzo institucional.

Javier Oliva Posada
Columnas
Foto: Especial
Foto: Especial

Realizada desde 2014 en las instalaciones del Heroico Colegio Militar, con sede en Tlalpan, la competencia militar Chimaltlalli reúne a un grupo de países, representados por sus academias y cadetes, en aras de fomentar convivencia, confianza y amistad, pero sobre todo intercambiar experiencias en la profesión de las armas. La competencia se desarrolló este año del 4 al 7 de marzo.

En esta ocasión las naciones invitadas fueron Brasil, Canadá, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Honduras, Venezuela y Sri Lanka.

Nuestro país estuvo representado, desde luego, por los cadetes del Heroico Colegio Militar y por la Heroica Escuela Naval.

Las pruebas a las que se someten los participantes exigen, además de una notable capacidad física, contar también con la formación necesaria para resolver problemáticas de carácter táctico y operativo en situaciones hipotéticas.

En la competencia por equipos, que se desarrolla a lo largo de una pista de 40 kilómetros de longitud, los resultados son la sumatoria de los puntos obtenidos en las cuatro etapas ante una serie de obstáculos y desafíos que deben resolverse al momento.

Y este año fueron los siguientes: en primer lugar, el Heroico Colegio Militar de México; en segundo, la Academia Militar Das Agulhas Negras de Brasil, y en tercero, el Royal Military College de Canadá. Desde luego que se trata de una buena noticia que deja en alto el nombre de México, pero también destaca la muy alta capacidad de la formación de las nuevas generaciones de militares de nuestro país en el siglo XXI.

Guía

Las condiciones que exige la profesión de las armas ante una compleja agenda de seguridad nacional e internacional demandan, en efecto, que la preparación sea actualizada, cumpla con estándares internacionales y se someta a constante comparación en aras de compartir experiencias y estar a la altura de los antagonismos que enfrentan Estados y sociedades.

Para México y su sistema educativo militar, que incluye por supuesto la formación profesional, física, académica, estratégica, táctica y operativa, contar con un factor humano de alta calidad implica una garantía para procesar las variables que de una u otra forma pueden alterar el desarrollo y la paz de la nación.

Desde luego que la obtención del primer lugar para México es consecuencia directa de un importante esfuerzo institucional, además del pleno reconocimiento que merecen los cadetes del Heroico Colegio Militar que integraron el equipo ganador. El sistemático proceso de preparación, así como las exigencias del servicio, evidencian la ruta correcta por la que marcha la formación de quienes con el paso de los años se harán cargo de las Fuerzas Armadas en general y, por lo tanto, serán custodios del compromiso para con la sociedad y las instituciones.

Se trata —como se constata— de una formación integral, en la que los valores o la axiología guían y garantizan la disciplina que distingue a los integrantes del Ejército, Fuerza Aérea y Marina-Armada de México. Sobre todo ante la inminente creación de la Guardia Nacional: la autoridad civil, funcionarios y representantes en general deben tener en claro el enorme potencial con el que cuenta el país para iniciar el funcionamiento de una estructura de base y sentido militar.

Vaya desde aquí una felicitación al Colegio Militar, al sistema educativo militar y al titular de la Secretaría de la Defensa Nacional, general secretario Luis Cresencio Sandoval González.