Ciudad de México, 12 de agosto 2025 — Un censo reciente sobre el axolote en los humedales de Xochimilco, Ciudad de México, su único hábitat, reveló que esta emblemática salamandra está en riesgo crítico de extinción debido a la contaminación, a las especies exóticas invasoras y a la pérdida de hábitat.
Liderado por el Laboratorio de Restauración Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el censo se realizó en 115 puntos dentro del Área Natural Protegida de Xochimilco — una zona de 2,522 hectáreas declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO, entrelazada por canales e islas agrícolas conocidas como chinampas. Por primera vez, las y los investigadores utilizaron muestras de ADN ambiental en combinación con lances de redes tradicionales para rastrear la presencia del axolote.
“A diferencia de censos anteriores, esta vez incluimos ADN ambiental para entender mejor dónde sobreviven los axolotes y cómo está cambiando su hábitat”, explicó Luis Zambrano, quien dirige el Laboratorio de Restauración Ecológica de la UNAM y lideró el censo. “Los resultados confirman lo que temíamos: la perturbación del hábitat está llevando al axolote al borde de su extinción. Su futuro y la salud de Xochimilco dependen de inversiones sostenidas en la chinampería, liderazgo local y un nuevo enfoque de vida urbana que integre a la naturaleza”.
Alguna vez abundantes, los axolotes han sufrido una drástica disminución: de un estimado de 6,000 por kilómetro cuadrado en 1998, se pasó a solo 36 en 2014, el último año en que se realizó un censo.
La primera fase del censo más reciente, realizado por la UNAM entre septiembre de 2024 y febrero de 2025, ofrece un panorama crítico y servirá de guía para futuros esfuerzos de restauración.
Una segunda fase del censo comenzará en septiembre de 2025 y se extenderá hasta febrero de 2026, y se espera que complete 1,055 lanzamientos de redes para poder comparar los resultados con el censo realizado en el año 2014.
¿Cómo protegerlo?
Para proteger al axolote y al ecosistema de humedal en su conjunto, chinamperas y chinamperos junto a científicas y científicos están ampliando un modelo de restauración conocido como chinampa-refugio. Desarrollado por la UNAM y actualmente apoyado por Conservación Internacional, este enfoque innovador combina técnicas agrícolas ancestrales con ciencia de la conservación. La restauración también incluye el apoyo a una nueva generación de chinamperos comprometidos con la protección de Xochimilco, un lugar trascendental para la cultura Xochimilca y la historia de México.
Cada chinampa-refugio actúa como refugio seguro para los axolotes. A la entrada de los canales designados, las chinampas están protegidas por biofiltros hechos de madera, grava y plantas nativas que bloquean el paso de depredadores invasores como la tilapia y la carpa. Diseñados por los propios chinamperos y el Laboratorio de Restauración Ecológica, estos biofiltros combinan saberes tradicionales con ciencia moderna.
Desde que se sumó al proyecto en 2023, Conservación Internacional, en cercana colaboración con el Laboratorio de Restauración Ecológica, ha contribuido a asegurar financiamiento, establecer vínculos con agencias gubernamentales y aumentar la conciencia pública sobre el valor de Xochimilco — tanto para los axolotes como para toda la ciudad.
“El haber encontrado trazas de axolote da esperanzas para continuar con los esfuerzos de restauración, donde toda la sociedad debe participar”, enfatizó Zambrano.