Para conservar el corazón en óptimas condiciones y que su funcionamiento permita a las personas disfrutar de la vida más allá de la octava década sin infartos, accidentes cerebrovasculares o muerte súbita es necesario tomar medidas a partir de hoy: reducir la ingesta de sal, azúcar, alimentos ultraprocesados, carnes rojas, alcohol y evitar el tabaquismo, para optar por consumir más verduras, frutas, semillas y realizar 30 minutos de actividad física.
Y antes de dar el primer paso es importante conocer las cifras de peso corporal, presión arterial, glucosa, colesterol y triglicéridos en sangre, recomiendan especialistas en salud cardiovascular.
Las enfermedades cardiovasculares se catalogan de hecho como la pandemia silenciosa detonante de más muertes al año en México. En 2019 más de 22% del total de muertes en el país fueron a causa de males cardiovasculares, principalmente por diabetes (53.4%), enfermedad isquémica del corazón (48%) e infartos al corazón (25.8%), de acuerdo con datos de la consultora Deloitte, que después de un análisis determinó que es un tema urgente resolver pendientes en materia de prevención y atención de las enfermedades cardiovasculares.
Entre 2015 y 2020, las enfermedades del corazón fueron la primera causa de muerte en México, pero esta tendencia cambió en 2021, cuando la pandemia de Covid-19 las desplazó al segundo lugar.
Las personas no solo enfrentan fallas cardiacas, sino que al estar entrelazadas con los riñones si falla el primero afectará a los segundos: el corazón se encarga de bombear la sangre hacia el resto de los órganos, transportando nutrientes y oxígeno, mientras que a la vez recolecta algunos desechos para que posteriormente sean eliminados; mientras que los riñones se encargan de depurar estos residuos, fomentan la producción de glóbulos rojos y conservan el balance de líquidos y electrolitos en el cuerpo.
“Al menos una vez al año los pacientes con diabetes deben tener una evaluación de riesgo cardiovascular, incluyendo pruebas de función renal. En México dos de cada cinco pacientes con diabetes tipo 2 desarrollarán enfermedad renal crónica y, desafortunadamente, uno de esos dos pacientes fallecerá a causa de una enfermedad cardiovascular”, comenta Gerardo Payró, cardiólogo intervencionista en el Instituto Nacional de Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ).
Durante 2021 se registró una prevalencia de diabetes de 10.2% en adultos de 60 años en adelante, pero las poblaciones jóvenes también son un sector que debe comenzar a considerar cambios en sus hábitos para prevenir este padecimiento, puesto que tanto la enfermedad renal como las enfermedades cardiovasculares representan un alto riesgo en este sector, agrega el especialista.
“Desde años atrás hemos notado un álgido incremento en los pacientes diagnosticados con diabetes, así como en su mortalidad. De la misma manera, se ha identificado que tanto la enfermedad renal crónica como las enfermedades cardiovasculares elevan el riesgo de muerte en pacientes con diabetes. Por ello es de suma importancia promover iniciativas de concientización para fomentar hábitos saludables y el monitoreo médico al menos una vez al año; es así como podremos reducir las cifras de la diabetes y sus complicaciones”, indica por su lado Ayin Alvarado, gerente médico de Bayer México.
En consecuencia obesidad, tabaquismo, mantener un estilo de vida sedentaria y padecer diabetes se consideran los principales factores de riesgo para desarrollar enfermedad cardiovascular y enfermedad renal. Por tal motivo una persona que vive con diabetes y desarrolla enfermedad renal crónica tiene tres veces más riesgo de morir por accidente cardiovascular.
Fibrilación auricular
Otra de las complicaciones de la diabetes y la hipertensión arterial mal tratadas es un corazón con fibrilación auricular, el cual presenta palpitaciones irregulares, así como ritmo cardiaco rápido o desincronizado que provoca que la sangre no se bombee de manera correcta, lo que puede generar la formación de coágulos que viajan a través del torrente sanguíneo, hecho que aumenta hasta cinco veces el riesgo de sufrir accidentes cerebrovasculares e incrementa la probabilidad de desarrollar insuficiencia cardiaca y, lo más grave, muerte súbita.
Esta condición es un problema de salud pública con gran prevalencia, ya que se estima que afecta a 34 millones de personas en el mundo y a más de 1.5 millones en México. Al respecto, Norma Alicia Balderrábano Saucedo, jefa del Laboratorio de Investigación en Cardiopatías Congénitas y Arritmias del Hospital Infantil de México Federico Gómez, destaca que “además de ser la arritmia más común, es una condición de salud que va en crecimiento: estadísticas indican que para los próximos 30 años la prevalencia estimada se duplicará”.
Una de las opciones terapéuticas de última generación es “la crioablación, que actualmente es el procedimiento más efectivo a largo plazo. Mediante ella se bloquean las señales eléctricas irregulares causantes de la fibrilación auricular gracias a un procedimiento mínimamente invasivo en el que se ingresa un balón (28 ml) que permite quemar con frío el tejido en las cámaras superiores del corazón, alrededor de las venas pulmonares, para bloquear las señales que desencadenan la condición”, explica Gerardo Rodríguez Diez, cardiólogo electrofisiólogo y miembro de la Sociedad Mexicana de Electrofisiología y Estimulación Cardiaca (Someec).
Medtronic presentó un sistema de monitoreo remoto que consiste en el empleo de tecnología móvil para que, por medio de un monitor y sin la necesidad de salir de casa, la persona que vive con un dispositivo automático implantable pueda enviar a su médico información sobre el estado de salud mediante los registros del dispositivo.
Esta tecnología funciona con un aparato en forma de mouse, el cual descansa sobre un puerto. Cuando el paciente pasa este mouse por su pecho, toma la lectura de información de su dispositivo implantable. “Como especialistas podemos ajustar las necesidades de monitoreo a cada paciente y con ello estar alertas de su seguimiento y rastreo de los episodios que presente, lo que nos permite a los profesionales de la salud contar con un sistema de detección de arritmias”, comentó Rodríguez Diez. Es así como el monitoreo remoto ayuda a reducir hasta en 35% las visitas a urgencias.
Medidas sencillas
Cuando se presentan síntomas como palpitaciones, dolor en el pecho o sensación de opresión, falta de aire sin motivo aparente e inflamación de los pies de manera simétrica, es necesario acudir a un profesional de la salud, recomienda el doctor Othniel Cortés Molina, especialista en cardiología intervencionista y hemodinamia.
Sugiere que a partir de los 40 años se realice un chequeo cardiovascular y un test metabólico para diagnosticar a tiempo enfermedades que puedan afectar al corazón. El estrés suele aumentar la presión arterial y en su forma más extrema puede provocar un ataque al corazón.
Algunas formas de ayudar a controlar el estrés incluyen la actividad física, escuchar música, enfocarse en algo tranquilo o sereno y meditar.
También señala que los buenos hábitos de sueño contribuyen a la salud del corazón; por el contrario, no dormir lo suficiente aumenta el riesgo de hipertensión, obesidad y diabetes, afecciones que como ya hemos visto aumentan el riesgo de enfermedades cardiacas. Si tiene problemas para dormir, consulte a un profesional de la salud, concluye el especialista miembro de la plataforma Doctoralia.