En México mueren cada año más de 200 mil personas por males cardiovasculares.
Si presenta una presión arterial superior a 130/80 o más, los niveles de glucosa en sangre son mayores a 99 mg/dl, hay colesterol alto, tiene sobrepeso u obesidad, lleva un estilo de vida sedentario y es mayor de 50 años es momento de poner atención al funcionamiento cardiovascular para evitar enfermedades del corazón.
Otro enemigo serio del corazón es el estrés crónico, ya que eleva la hormona de cortisol en sangre y se presentan trastornos del sueño, condiciones que a la larga generan hipertensión que afecta la función cardiovascular.
En México cada año mueren más de 200 mil personas por males cardiovasculares, pero estos pueden prevenirse si se controlan hipertensión arterial, diabetes mellitus, obesidad, se evita el tabaquismo y se realizan 30 minutos de actividad física, sugieren especialistas.
Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revelan que en el mundo anualmente pierden la vida 20.5 millones de personas a causa de fallas cardiacas. Y se prevé que para 2030 casi 26.6 millones de personas pueden morir por alguna enfermedad cardiovascular.
Por ello, en el marco del Día Mundial del Corazón que se conmemora el 29 de septiembre, el mensaje es Usa el corazón. Conoce tu corazón: los especialistas exhortan a la población a cambiar alimentos ultraprocesados, bebidas azucaradas y sedentarismo por un estilo de vida saludable.
El porcentaje de mejora o prevención de las enfermedades cardiacas depende de muchos factores, como edad, sexo, antecedentes familiares, estado de salud actual y tipo e intensidad de los hábitos saludables que se adopten.
De hecho, algunos estudios en China, Estados Unidos y Europa estiman que seguir un estilo de vida saludable puede reducir el riesgo de muerte por enfermedades cardiacas en 50 o incluso 80% en comparación con las personas que no lo hacen.
Se conocen cuatro padecimientos del corazón: enfermedad coronaria, hipertensión, accidente cerebrovascular e insuficiencia cardiaca. Esta última afecta a 2% de la población mexicana, equivalente a 1.5 millones de personas, que presentan síntomas como dificultad para respirar, tos seca, silbidos al respirar, retención de líquidos con hinchazón de tobillos, piernas y abdomen, así como fatiga y dificultad para realizar actividades cotidianas como caminar, subir escaleras o realizar ejercicio.
“La insuficiencia cardiaca es una enfermedad crónica, debilitante y potencialmente mortal, en la cual el corazón no puede bombear suficiente cantidad de sangre para satisfacer las necesidades del cuerpo o para hacerlo requiere un mayor volumen de sangre, lo que da como resultado la acumulación de líquido en pulmones y tejidos periféricos”, explica el doctor José Antonio Magaña Serrano, miembro de la Asociación Nacional de Cardiólogos de México y de la Sociedad Mexicana de Cardiología.
El especialista comenta que el envejecimiento de la población y el incremento de las enfermedades crónico-degenerativas hacen que la insuficiencia cardiaca sea cada vez más frecuente. “Si se logra diagnosticar y tratar a tiempo hay esperanza para los pacientes, pues con cambios en los hábitos de vida y un manejo médico farmacológico oportuno la historia cambia”, puntualiza.
Ahora el portafolio médico para la atención de insuficiencia cardiaca se amplía con innovaciones terapéuticas. “Los inhibidores del cotransportador de sodio-glucosa tipo 2 (iSGLT2), fármacos imprescindibles en el manejo de esta condición, han demostrado una reducción significativa de hospitalizaciones y riesgo de mortalidad cardiovascular, otorgando calidad y esperanza de vida a millones de pacientes”, menciona la doctora Isabel Balderas, gerente médica del área de Alta Especialidad para Boehringer Ingelheim México, Centroamérica y el Caribe.
Hipertensión arterial
Otra de las enfermedades crónicas que afectan el buen funcionamiento del corazón es la hipertensión arterial. Es un padecimiento en el que aumenta la presión con la que el corazón bombea sangre a las arterias para que circule por todo el cuerpo. El sobrepeso y la obesidad pueden aumentar la presión arterial, suben los niveles de glucosa en la sangre, colesterol, triglicéridos y ácido úrico, lo que dificulta que la sangre fluya por el organismo, de acuerdo con datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
A nivel mundial se estima que existen más de mil millones de personas con hipertensión. En México se habla de 30 millones y el IMSS atiende a seis millones de personas que acuden periódicamente a consulta externa de Medicina Familiar para tratarla.La mayoría de las personas que padecen de hipertensión arterial no lo saben porque no tienen ningún síntoma, pero hay quien puede presentar dolor de cabeza intenso, mareo, zumbido de oídos, sensación de ver lucecitas, visión borrosa, dolor de pecho y tobillos hinchados.
La hipertensión es el principal factor de riesgo de enfermedad cerebrovascular y es una condición médica grave que aumenta significativamente los riesgos de enfermedad cardíaca, cerebral, renal y otras.
Principales enfermedades cardiovasculares
Enfermedad coronaria Se produce cuando las arterias que suministran sangre al corazón se estrechan o bloquean, lo que puede llevar a un ataque cardiaco.
Hipertensión La presión arterial alta aumenta el riesgo de enfermedades cardiacas y accidentes cerebrovasculares.
Insuficiencia cardiaca El corazón no puede bombear sangre de manera eficaz, lo que puede llevar a la fatiga y la falta de aire.
Accidente cerebrovascular Una interrupción del flujo sanguíneo al cerebro, que puede tener graves consecuencias.
Hábitos Saludables
Alimentación balanceada Prioriza una dieta rica en frutas, verduras, granos enteros y proteínas magras. Limita la ingesta de grasas saturadas y azúcares refinados.
Ejercicio regular La actividad física regular fortalece el corazón. Apunta al menos a 150 minutos de ejercicio moderado por semana.
Dejar de fumar El tabaquismo es un factor de riesgo importante. Busca ayuda para dejar de fumar.
Control médico Realiza chequeos regulares para monitorear la presión arterial y el colesterol. Conoce tus números y trabaja con tu médico para mantenerlos en rangos saludables.
Gestión del estrés Encuentra técnicas de manejo del estrés que funcionen para ti, como la meditación o el yoga.
Moderación en el alcohol Si consumes alcohol, hazlo con moderación. El exceso puede dañar el corazón.