INCENDIOS FORESTALES ALCANZAN MÁXIMOS HISTÓRICOS

“En Francia un incendio arrasó más de 13 mil hectáreas”.

Incendios forestales
Bienestar
Share

Tanto en Europa como en Asia Occidental y Canadá estos siniestros aumentan rápidamente en frecuencia, intensidad y complejidad.

Los incendios forestales cruzan fronteras alrededor del mundo, convirtiéndose en una amenaza global que parece imparable: cada verano las olas de calor extremo, combinadas con sequías prolongadas y la creciente actividad humana, contribuyen al aumento de estos desastres devastadores.

En Europa, Asia Occidental y América del Norte los incendios forestales aumentan en frecuencia, intensidad y complejidad.

Este fenómeno está estrechamente relacionado con el cambio climático, la deforestación y la pérdida de ecosistemas.

Europa y Asia

En el Viejo Continente la situación alcanza niveles alarmantes. Este verano la región mediterránea vivió incendios sin precedentes. En Aude, al sur de Francia, un incendio descontrolado arrasó más de 13 mil hectáreas, superando en extensión a la ciudad de París. Con temperaturas extremas, fuertes vientos y sequía, más de dos mil bomberos fueron desplegados para intentar contener las llamas. Según los informes locales, al menos una persona falleció y otras 13 resultaron heridas. El alcalde de Jonquières describió la situación como una “escena de tristeza y desolación”.

Este escenario no es único. Un estudio internacional titulado Increasing risk of fire due to climate change, publicado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de España, revisa más de 500 estudios previos y señala que las condiciones climáticas actuales favorecen la propagación de incendios en diversas regiones.

Advierte que si no se toman medidas para mitigar el calentamiento global el riesgo de incendios podría aumentar significativamente en las próximas décadas.

Según datos del Servicio de Cambio Climático Copernicus de la Unión Europea, Europa se calienta el doble de rápido que el promedio global desde la década de 1980.

Sin embargo, Europa no es la única región afectada. En Asia Occidental países como Turquía y Grecia también sufren incendios devastadores.

En Turquía, cerca de Bursa, un incendio arrasó miles de hectáreas, mientras que en Grecia, cerca de Atenas, se evacuó a decenas de miles de personas. Los fuertes vientos y temperaturas récord exacerban la propagación de las llamas, desbordando la capacidad de respuesta.

América del Norte

En esta región los incendios forestales alcanzan también magnitudes históricas. En 2023 más de 18 millones de hectáreas de tierra fueron arrasadas por las llamas en Canadá, un país tradicionalmente menos vulnerable a este tipo de desastres. Además, esos incendios liberaron emisiones de carbono ocho veces mayores que el promedio de las décadas anteriores, lo que subraya el papel clave del cambio climático en su intensificación.

Estados Unidos tampoco es ajeno a este problema. En Arizona el incendio más grande del país recién destruyó más de 400 kilómetros cuadrados de terreno. La formación de “nubes de fuego”, que pueden generar sistemas meteorológicos erráticos, complica los esfuerzos de los bomberos, ya que estas nubes alimentan el fuego con vientos secos y poderosos.

Este fenómeno de nubes pirocúmulos, que indica un comportamiento impredecible del fuego, deja claro que la lucha contra los incendios forestales es cada vez más desafiante.

México

Nuestro país, aunque no tan visible a nivel global durante esta temporada como Europa o América del Norte en cuanto a incendios forestales, es duramente afectado por un aumento en la frecuencia e intensidad de estos desastres en los últimos años.

Según la Comisión Nacional Forestal (Conafor), en lo que va del año se registran seis mil 364 incendios forestales que afectaron 992 mil 650 hectáreas, convirtiendo a 2025 en el segundo año más crítico, después de 2024, cuando se registraron siete mil 676 incendios que impactaron un millón 615 mil hectáreas. Las zonas más afectadas han sido Chihuahua, Durango, Sinaloa, Guerrero y Jalisco.

“Este año la sequía está más localizada en el noroeste del país y el fenómeno de El Niño ha sido menos severo, lo que reduce la propagación de los incendios. Sin embargo, el problema sigue siendo complejo. La principal causa sigue siendo la acción humana, ya que 98% de los incendios es provocado por actividades humanas”, dice a Vértigo César Alberto Robles Gutiérrez, gerente de Manejo del Fuego de Conafor.

Las actividades agropecuarias, indica, son las que más contribuyen a este tipo de siniestros, por lo que puntualiza la importancia de la responsabilidad social en el uso del fuego.

En términos de prevención, Robles menciona que la Conafor implementa un programa nacional de manejo del fuego con base en siete estrategias clave, entre ellas la coordinación interinstitucional desde gobiernos locales hasta Organizaciones No Gubernamentales.

El trabajo de los combatientes forestales también es crucial. Estos brigadistas son entrenados físicamente con más de 20 cursos especializados para manejar los riesgos de los incendios de manera efectiva. “Es fundamental que nuestros brigadistas estén capacitados, ya que la rapidez y eficacia con la que actúan puede marcar la diferencia entre el control y la propagación del fuego”, subraya.

En este sentido, dice, México ha intensificado su cooperación internacional en el manejo de incendios forestales. “Contamos con convenios con países como Canadá y Estados Unidos para compartir conocimientos y entrenamientos en el manejo del fuego. Además, trabajamos con Chile y participamos en algunos foros en colaboración con la Unión Europea”, explica Robles.

En julio un tercer contingente de brigadistas mexicanos viajó desde Guadalajara, Jalisco, a la provincia de Saskatchewan, en Canadá, para sumarse a los esfuerzos internacionales de combate a los incendios en ese país. Canadá expresó públicamente su gratitud, a través de un mensaje del Ministerio de Asuntos Exteriores: “Agradecemos sinceramente a México su apoyo y solidaridad con Canadá y los canadienses”.

Lo anterior confirma que a medida que la crisis de los incendios forestales se intensifica, la cooperación internacional y la innovación tecnológica se presentan como elementos cruciales para enfrentar este desafío global.

México, al igual que otros países, debe continuar desarrollando e implementando medidas preventivas y de respuesta eficaces para reducir los riesgos y mitigar los daños ocasionados por estos desastres.

×